La modelo Ashley Graham, conocida por ostentar un físico que no responde a los cánones de belleza convencionales –su formas son más rotundas– se ha declarado harta del culto a la delgadez que impera en las pasarelas. Según ella, mujeres extremadamente delgadas son contratadas para desfilar, además de ser retocadas con Photshop en sus posados para las revistas.

 

 

Por este motivo, ha escrito lo siguiente en su cuenta de Instagram: “Hago ejercicio. Hago todo lo que puedo por comer sano. Adoro la piel en la que estoy. Y no estoy avergonzada por algunos grumos, bultos o celulitis… y tú tampoco deberías”. Junto al texto, la modelo de talla grande ha incluido una imagen suya bronceándose en la playa. En la fotografía, se comprueba que su físico es normal y sin artificios, y ella lo luces sin complejos.