Cada vez que Cayetano Martínez de Irujo habla sube el pan. El hijo pequeño de la Duquesa de Alba es sin duda el más polémico de la familia y después de un intenso año, en el que incluso ha encontrado el amor con una joven de 20 años, el aristócrata concede una liberadora entrevista a la revista Vanity Fair, en la que revela las partes más ocultas de su vida, incluso la relación su madre y sus hermanos, que se ha visto deteriorada durante este último tiempo.
Este último año ha sido decisivo para el estado de salud de Cayetano, que ha estado ingresado hasta en cinco ocasiones debido a problemas relacionados con el aparato digestivo. Pero a pesar de estas dificultades, Cayetano ha terminado el año con una nueva ilusión, tras encontrar de nuevo el amor. El jinete empezaba una relación con Bárbara Mirjan, una estudiante de 20 años, de la que Cayetano no ha querido responder a la revista por respetar su vida privada.
Pero de quien Cayetano sí ha hablado en la entrevista es de su madre y sus hermanos, sorprendiendo con sus declaraciones.
El Duque de Arjona revela que es el que tiene un carácter más parecido a su madre y por eso mismo chocaban tanto, pero confiesa la diferencia entre ambos: "Yo tengo sentido de la justicia, algo que heredé de mi padre. Ella en cambio, era visceral como una leona: protegía y admiraba al fuerte e ignoraba al débil. Era generosa con la gente, pero le costaba tratar con los débiles".
Sobre la relación con su madre Cayetano se sincera y descubre que no siempre fue tan perfecta como al final y que incluso llego a marcar su infancia y su relación con las mujeres: "De joven yo confundía el amor con el sexo porque me faltó el afecto de mi madre. Buscaba en las mujeres el cariño que ella no me dio. Con 35 años se lo dije y fue un shock para ella. Estuvo llorando durante dos días". Aunque asegura que eso significo un punto de inflexión en su relación y desde ahí la Duquesa intento recuperar todo el tiempo perdido.
Con quien la relación no se encuentra en su mejor momento es con sus hermanos. La muerte de la Duquesa de Alba significó la separación de sus herederos, con la que mucho se ha especulado debido a la salida de Cayetano del Palacio de Liria, que el mismo explica: "Es normal que me tuviera que ir porque ya no era mi casa. Mi hermano Carlos no me echó, me invitó a que me fuera y lo entendí porque necesitaba mi zona del palacio para sus hijos". Y confiesa cómo es la relación ahora que su madre no está: "Nos llevamos bien pero no estamos muy unidos, lo normal. Mi madre lograba juntarnos porque capitaneaba todo, pero cuando se fue hubo una confusión muy grande. Se nota su ausencia y cada uno está intentando encontrar su sitio".
Pero llama la atención las palabras de Cayetano al hablar de su hermana Eugenia, con la que siempre ha parecido estar muy unidos: "Con Eugenia intenté ser padre, hermano y amigo. Y lo sigo intentando. A lo mejor fallé un poco en todo. Estoy seguro de que cometí muchos errores porque algo se ha roto dentro de ella con respecto a mí. Me gustaría que confiara más en mí como antes. Debería analizarlo con más profundidad y cariño con ella". Mientras de su hermano Carlos, el actual Duque de Alba declara: "A Carlos le produzco desconcierto. Quizá le sobrepasa mi forma de ser".