Un hombre de negocios musulmán ha erigido el árbol de Navidad más alto en Bagdad como muestra de solidaridad con los cristianos durante la temporada navideña.
Según ha explicado el mismo empresario Yassir Saad en declaraciones en The Associated Press recogidas por The Telegraph, la iniciativa tiene como objetivo "unirse a nuestros hermanos cristianos en sus celebraciones navideñas y ayudar a los iraquíes a olvidar su angustia, especialmente la guerra en Mosul", donde las fuerzas iraquíes están luchando contra el grupo terrorista Daesh.
26 metros de altura
El árbol artificial de 26 metros de altura, con un diámetro de 10 metros, se ha erigido en el centro de un parque de diversiones de la capital iraquí. Saad ha afirmado que la iniciativa costó alrededor de 24.000 dólares.
"Este árbol representa el amor y la paz", añadió la maestra Saba Ismael, mientras sus estudiantes tomaban fotografías frente al árbol. "Deseo que todos los cristianos iraquíes puedan regresar a Irak y vivir una vida normal y pacífica".