Panel de cotizaciones de los valores del Ibex Medium Cap y del Ibex Small Cap / EFE

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Business

¿Cuáles son los valores de la bolsa española con mejores dividendos?

Los bajos intereses que ofrecen los productos de renta fija hacen más atractivo el reparto de beneficios de las empresas cotizadas

2 septiembre, 2016 00:00

Los dividendos se han constituido en una parte muy importante del retorno de las inversiones en la bolsa. Hasta el punto de que todas las empresas nacionales que se encargan de proporcionar esta retribución al accionista están reunidas en un índice bursátil propio y de reciente creación. Se trata del Ibex 35 Dividendos, que durante este ejercicio mantiene una pérdida del 6,25%. En línea con la evolución de los principales mercados financieros, que en todos los casos se están depreciado con respecto a la cotización de 2015. Aunque con mejor comportamiento que el índice selectivo nacional, que se deja durante los primeros ochos meses un 9,30%. Esto quiere decir que las empresas que se decantan por aplicar esta política retributiva lo están haciendo mejor que las restantes, con una diferencia en torno tres puntos.

Todo ello en un entorno nacional que no está exento de ciertos problemas para conformar el pago de dividendos. Tal y como se constata a través de los datos facilitados por Henderson Global Dividend Index, que ponen de manifiesto que esta retribución al accionista se redujo durante el segundo trimestre del año en España en un 19%. El motivo para explicar esta importante desaceleración hay que buscarlo en la pérdida de rentabilidad del dividendo de Banco Santander. Los restantes valores de la renta variable española, durante este periodo, mantuvieron o incluso aumentaron este pago que ofrecen regularmente a sus accionistas.

Empresas con rentabilidad por encima del 6%

La bolsa nacional es una de las más generosas para retribuir a los accionista con este pago fijo y anual, por encima de otros mercados de renta variable internacional. Su rendimiento medio en la actualidad es del 4,6%, según los datos del consenso de los analistas que agrupa Bloomberg. De todas formas, por medio de una selección de empresas que apuestan claramente por esta retribución, los márgenes de rentabilidad pueden mejorarse fácilmente y rebasar la barrera del 6% anual. De cualquier forma, siempre por encima de la ofrecida por la renta fija tradicional y que está representada por los más importantes productos bancarios (depósitos a plazo, pagarés, etc.). Cuyo rendimiento raramente sobrepasa el 0,50% en condiciones normales de contratación, como consecuencia del abaratamiento del dinero por parte del órgano monetario comunitario.

Saeta Yield, Telefónica, Endesa, BME, Repsol y Naturhouse son los referentes para encarar esta estrategia de inversión durante este año. En todos los casos con un rendimiento superior al 6%, y liderando la rentabilidad por dividendo. Además, para incentivar esta atractiva remuneración, cuenta con un efecto imprevisto: la debilidad de los mercados está incrementando su rentabilidad, como consecuencia del vínculo directo entre el dividendo y la cotización de la acciones. De forma, que los pequeños inversores que compren acciones en estos momentos, tendrán un retorno sensiblemente más elevado con respecto a las operaciones de hace un año.

Como sector bursátil, el energético es uno de los más proclives a generar un buen pago todos los años, sin excepciones. Todas sus empresas (Red Eléctrica, Enagás, Iberdrola, Gas Natural...) proporcionan pagos superiores al 5%, y por encima de la media de la bolsa. Siendo, en cualquier caso, uno de los destinos preferidos de los ahorros de los inversores más defensivos. No en vano, desean protegerse a través de los ingresos garantizados que ofrecen estas empresas de forma interrumpida desde hace muchos años.

Telefónica es otro de los valores más rentables por este concepto. En concreto, es la segunda empresa más rentable del índice selectivo, con un interés por dividendo para este año del 7,59%, donde prevé un abono de 0,75 euros por acción. Mapfre y Mercados y Bolsas y Mercados Españoles (BME) son otra de las opciones que disponen los inversores para rentabilizar sus ahorros por medio de esta estrategia para la inversión. Con un rendimiento anual del 6,43% y 5,37%, respectivamente. Integrando en los dos casos el top ten de las compañías que mejor remuneran a sus accionistas.

Con diferentes plazos en su cobro

Los dividendos dan derecho a un cobro que puede formalizarse trimestral, semestral o anualmente, en función de las política retributiva llevada a cabo por cada empresa. Aunque es habitual que los bancos la ejerciten cada trimestre, mientras que las empresas energéticas o ligadas al consumo lo reparten dos veces al año. De todas formas, no es un ningún regalo el que hacen a los inversores, sino que se descuenta directamente de su cotización. Normalmente el precio lo recupera en varias sesiones bursátiles, siempre y cuando no esté influido por una tendencia bajista de largo recorrido que deprecie sus precios progresivamente.

El poco interés que producen en la actualidad los productos destinados para el ahorro está propiciando que un buen número de pequeños ahorradores se decanten por esta estrategia como fórmula para incrementar el saldo de su cuenta corriente. En cierta forma, es un recurso muy original para conformar una renta fija dentro de la variable. Independientemente de la evolución de sus precios, ya que si éstos no se comportan conforme a sus expectativas siempre dispondrán de una liquidez fija y garantizada todos los años. Hasta el punto que pueda compensar las posibles pérdidas generadas en los mercados de renta variable.

El importe de los dividendos va a parar directamente a la cuenta corriente de los accionistas a partir de su fecha de pago. Pero no en bruto, sino que la cantidad será neta, una vez descontados sus correspondientes impuestos. Incluso hay otra forma para beneficiarse de esta retribución que consiste en suscribir fondos de inversión de renta variable que están basados en empresas que mantienen esta política retributiva. Pueden proceder, no solamente de la bolsa española, sino de los países de nuestro entorno.