Oriol Segarra, consejero delegado de Uriach / CG

Oriol Segarra, consejero delegado de Uriach / CG

Business

Uriach se apoya en los 'no prescritos' para crecer y mantiene el reto de alcanzar los 300 millones

La farmacéutica factura 196 millones, el 13% más, y refuerza su presencia internacional como palanca de desarrollo

4 julio, 2019 12:24

La farmacéutica Uriach cerró 2018 con unas ventas de 196 millones de euros, el 13% más que en el ejercicio anterior. La compañía, con sede en Palau-solitá i Plegamans (Barcelona), se congratula del crecimiento a doble dígito por sexto año consecutivo y remarca que sigue adscrita a una estrategia optimista de facturar 300 millones para 2022. La mayor parte de la caja se sostiene en el Consumer Healthcare, medicamentos no prescritos que se distribuyen en farmacias y parafarmacias.

A pesar de que será necesario incrementar la facturación en más de 100 millones para lograr el reto, el consejero delegado de Uriach, Oriol Segarra, ha asegurado que 2018 solo ha sido el primero de los cinco años del nuevo Plan Estratégico y que se van a reforzar tanto en el crecimiento orgánico como inorgánico. El mercado del Healthcare supone ya “el motor de crecimiento" que apuntala el reto de la compañía. Los no prescritos generaron un volumen de negocio de 114 millones en 2018, el 19% más que el año anterior. Además, la empresa se halla en plena consolidación internacional en Italia y Portugal, al tiempo que busca nuevos socios europeos para este área de negocio. No obstante, la expansión ha supuesto una merma en el beneficio bruto (ebitda), que se ha reducido hasta los 41 millones, diez menos que el año anterior.

Reducción del beneficio

“Estamos dispuestos a invertir en el futuro, por lo que el ebitda será un poco más bajo de lo que debería ser durante un par de años”, ha afirmado Segarra, que pronostica un crecimiento “tanto en facturación como en ebitda” en 2019. Las ventas fuera de España ya suponen el 60% del volumen de negocio de Uriach, propietaria de marcas como Aquilea o Fisiocrem.

En lo que respecta al negocio en Italia, donde se adquirieron el año pasado las compañías locales Progine y AR Fitofarma, la facturación ha sido de 42 millones de euros, lo que supone disparar el dato del año anterior un 30% más. En el caso de Portugal, la consolidación aún está menos adelantada y las ventas fueron de 6 millones, el 25% más. Segarra ha admitido que buscan expandirse a Francia como mercado prioritario aunque la falta de un socio idóneo está retrasando la operación, por lo que no descarta que el próximo paso tenga como destino “Alemania u otro país grande de la Unión Europea”.

Crecimiento "ordenado"

"Preferimos hacer un crecimiento ordenado, convirtiéndonos en una empresa líder en los países donde estamos antes que ser irrelevantes en muchos territorios", ha manifestado Segarra a la vez que ha puesto énfasis en el carácter familiar de la farmacéutica. No obstante, deja claro que no tienen "la vocación de ser un player muy grande. Buscamos productos que no les interesan a las grandes compañías y que tienen algún valor añadido".

En cuanto a la línea de medicamentos prescritos y comercialización de principios activos, un área ya consolidada aunque menos potenciada, Uriach facturó 82 millone, un 5% más. En este campo destaca el lanzamiento de la Rupatadina, un antihistamínico que se ha introducido en países como Japón, Canadá y Corea.