Los payeses denuncian abusos de grandes cadenas con una marcha de tractores

Los disparados precios de la electricidad y su traslado al gran consumo han vuelto a poner en pie de guerra a los agricultores contra las grandes superficies, a las que acusan de condenarles a “no poder ganarse la vida” debido a los reducidos precios que pagan por sus productos.

Este sábado, centenares de payeses han bloqueado con sus tractores accesos a establecimientos de grandes cadenas de distribución y provocado algunos cortes carreteras para exigir lo que consideran un precio justo por sus mercancías y denunciar los abusos que creen que imponen estas empresas.

Bloqueo de accesos 

Las protestas se han sucedido en diversos puntos de las ciudades de Lleida, Girona y Tarragona, así como en diversos municipios de Cataluña como los barceloneses de Malla y Villafranca del Penedès, además de Figueres (Girona) o La Seu d’Urgell (Lleida), entre otros.

Los payeses han llegado con sus tractores hasta las puertas de los establecimientos para bloquear los accesos y en algunos casos han derramado botes de pintura blanca y roja, además de portar pancartas con el lema “Basta de abusos de la gran distribución”.

Manifiesto de Unió de Pagesos

Además, portavoces de Unió de Pagesos han leído el manifiesto de la protesta, que reclama un "precio justo" por las mercancías agrícolas y advierte a los consumidores de que las grandes superficies "abusan de la posición de fuerza en la cadena alimentaria" y son responsables de que los payeses no puedan "cubrir costes ni ganarse la vida".

El sindicato denuncia que las grandes cadenas de distribución aprovechan la situación de “oligopolio” en la que se encuentran para imponerles precios ínfimos en determinados productos mientras fomentan las marcas blancas, que ofrecen precios por debajo de los costes de producción al tiempo que obtienen grandes márgenes. Entre estas mercaderías se encuentran la leche, el vino, los aceites, el arroz y las carnes de ternera y conejo, entre otros.

También en redes sociales

La situación se lleva produciendo hace tiempo pero el incremento de los costes derivados de la espiral inflacionista de los últimos meses, agravada en las últimas semanas por la guerra en Ucrania ha terminado por hacer estallar al colectivo, que exige medidas como la implantación de un gasóleo agrario con un gravamen fiscal mínimo, rebajas en otros impuestos como el IVA y también en la factura eléctrica.

La protesta, que se enmarca en una campaña iniciada el pasado 3 de marzo para denunciar la "inacción" de los gobiernos ante la situación de los agricultores, también se ha trasladado a las redes sociales, donde se han publicado imágenes para comparar los precios de los productos alimentarios, como los 0,20 euros que recibe un agricultor por un kilo de manzanas frente al 1,65 de precio en el supermercado.