Enric Batlle, director general de la nueva Nomen Foods, la principal empresa arrocera del Delta de l'Ebre / CG

Enric Batlle, director general de la nueva Nomen Foods, la principal empresa arrocera del Delta de l'Ebre / CG

Business

Los arroceros del Ebro toman el 11% de Nomen Foods

La asamblea de cooperativistas dan el visto bueno a la nueva estrategia de negocio de los fabricantes de Nomen, Bayo y Segadors del Delta, que abren oficina en Madrid

30 agosto, 2018 12:24

Nomen Foods ha completado esta semana la operación que la constituye como la principal empresa arrocera de la zona del Delta de l’Ebre (Tarragona). La asamblea de cooperativistas de la zona, unidos bajo el paraguas de Arrossaires del Delta de l’Ebre, han dado su visto bueno a los movimientos de acciones con los que se completa la nueva estrategia empresarial.

Los 950 socios que se dedican al cultivo del arroz en ese territorio se han repartido a título individual el 11% del capital de Nomen. El 89% restante será propiedad de la cooperativa original. La distribución implica un cambio práctico. Que el día a día de la sociedad que comercializa marcas tan conocidas por el gran público como Nomen, Bayo o Segadors del Delta opere como una empresa más, sin tener que someterse a las peculiaridades de una cooperativa.

Gestión empresarial

Tal y como advierte el director general del grupo, Enric Batlle, en un comunicado, el incremento en la “actividad, patrimonio y penetración en el mercado español en los últimos años” urgía a dar este paso. “Necesitábamos nuevas fórmulas societarias, organizativas y financieras” que fortalecieran la gestión empresarial.

La constitución de Nomen Foods también ha impactado en el reparto de activos del grupo. La sociedad será a partir de ahora la encargada de gestionar la producción y comercialización de las marcas. También se queda con la venta de arroz a granel que se usa en varias actividades industriales y el que se destina a la importación.

Reparto de activos

La cooperativa mantendrá un papel capital en el futuro de la compañía. Arrossaries se queda con el desarrollo agronómico. Es decir, con ofrecer asesoramiento a los arroceros para mejorar la producción de sus explotaciones y con los proyectos de I+D para mejorar las semillas y las  variedades de arroz.

Cabe tener en cuenta que el auge de los productos ecológicos y que llevan la etiqueta de naturales también ha hecho mella en los cultivos de arroz, ya que priman las variedades menos manipuladas. De hecho, otra de las responsabilidades de Arrossaires será impulsar actividades relacionadas con la defensa del medio ambiente.

Oficina en Madrid

La nueva etapa en el grupo de agroalimentación está enfocada en el crecimiento. Batlle indica que quieren hacerse fuertes en el mercado español. Para conseguir este objetivo, han abierto una oficina comercial en Madrid. El equipo de la capital trabajará para “ofrecer el mejor servicio a nuestros clientes”.

Arrossaires del Delta de l’Ebre cerró el ejercicio 2017 con un beneficio neto de 1,64 millones de euros, el 7,5% más que en 2016. La facturación fue de 35,8 millones. En este caso, el avance se queda en el 3,4%. La cooperativa comercializó 38.000 toneladas de arroz, el 10% más que en 2016.