El ex vice primer ministro liberal de Reino Unido, Nick Clegg / CG

El ex vice primer ministro liberal de Reino Unido, Nick Clegg / CG

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Nick Clegg pide ante los empresarios de Aecoc un “Plan Marshall para el Mediterráneo”

El ex vice primer ministro de Reino Unido repasa los motivos que provocaron el triunfo del ‘Brexit’ y pide a Theresa May que interponga “los intereses del país a los de su partido”

6 abril, 2017 15:40

La asamblea general de la patronal de empresas de gran consumo de España, Aecoc, ha finalizado este jueves en Barcelona con una master class de política internacional impartida por el ex vice primer ministro liberal de Reino Unido Nick Clegg. Ha arrancado el discurso con un aviso: “Voy a ser muy diplomático con Gibraltar”. Y así lo ha sido, tanto en el debate abierto sobre el futuro del Peñón como en el de los otros grandes retos que tienen Europa y Gran Bretaña ante el Brexit y demás conflictos abiertos.

“Europa está sumida en una proceso de transformación”, ha manifestado en una intervención íntegramente en español --“me defiendo con el idioma que he aprendido en mis vacaciones”--. Más allá del divorcio de Reino Unido con la Unión Europea, el político británico ha hablado de la crisis de la Eurozona y de las que se refieren a seguridad y migratoria.

Recursos para el Mediterráneo

Ante este último escenario, ha pedido un “Plan Marshall para el Mediterráneo”. Movilizar recursos económicos: “Por nuestra seguridad, debemos hacer más para solucionar las fuentes del conflicto que continuarán desfigurando la zona”.

Asegura que es “esencial” solucionar el “profundo error” que implicó crear un espacio Schengen que “eliminó las fronteras internas sin hacer nada para reforzar las externas”. Y eso, según su relato, ha derivado en la actual crisis de los refugiados que “a su vez ha sido una de las mayores causas del incremento del populismo”.

Petición a Theresa May

Se refiere al movimiento que crece en Europa contra el statu quo y que propició, entre otros, el éxito del Brexit: “Uno de los actos de autolesión más radicales tomados en un país en la edad moderna”. Clegg ha reclamado a Theresa May, la premier británica, que “interponga los intereses del país a los de su partido” y que abandone su intención de divorciarse de la Unión Europea de la forma más dura.

“No tenía la necesidad de anunciar que Reino Unido saldría del mercado único y de la unión aduanera” que llevarán al país a una “relación económica más distante con la Unión Europa que Noruega, Islandia o Turquía”.

Fin de la ‘City’

Reclama que se abandone esta ruptura radical y que se empiecen a resolver grandes incógnitas como el futuro de Gibraltar, una de las cuestiones del debate de los últimos días. Sobre el futuro de las empresas implementadas en Reino Unido, ha sido moderado y sólo se ha referido a la City al ser preguntado sobre ello.

El ex vice primer ministro ha afirmado que, en breve, las entidades internacionales anunciarán que abandonan Londres y apuestan por otro hub financiero en la Unión Europea que les permita ofrecer servicios integrales a todos los clientes. “Centros como Dublín, Madrid o Frankfurt”. Barcelona no está en la terna del político británico.

Referéndum de independencia escocés

También ha sido preguntado sobre si Europa debería apoyar el referéndum de independencia catalán. “No voy a entrar en este debate”, ha manifestado de forma tajante. Asegura que esta es una cuestión que se debe resolver entre los “políticos españoles y catalanes” y señala las diferencias del procés con la autorización de Londres a la votación en Escocia.

“Nosotros no tenemos Constitución”, ha advertido. El político liberal ha explicado que cuando estaba en coalición con David Cameron, predecesor de May en el cargo, tomaron la decisión de que, “como principio político”, no frenarían el referéndum si los nacionalistas escoceses conseguían convocarlo con una mayoría absoluta en el Parlamento de Edimburgo. “Lo ganaron y es muy difícil hacerlo con el sistema electoral de la Cámara”, por lo que no tenían el “derecho político de bloquearlo”.

Eso sí, ha alertado de que esta decisión no implica “repetirlo cada dos o tres años”.