Laurent Dereux, director general de Nestlé hasta finales de mayo con una fabada litoral con menos grasas y sal / CG

Laurent Dereux, director general de Nestlé hasta finales de mayo con una fabada litoral con menos grasas y sal / CG

Business

Nestlé rebaja la grasa y la sal incluso en la fabada asturiana

El grupo se fija como objetivo que en cinco años, entre el 10% y el 15% de la cifra de negocios del grupo provenga de productos con un perfil ecológico

23 mayo, 2018 12:27

Nestlé incide en el giro que ha dado en su estrategia de producto. La multinacional suiza abrazó hace un par de años la tendencia al alza de la alimentación saludable y ahora se fía a los “productos que tienen la calificación bio” para crecer. Así lo ha indicado el director de la filial española, Laurent Dereux, este miércoles en su última rueda de prensa como primer ejecutivo de la región. Pasará el testigo a Jacques Reber, de Nestlé Filipinas, a finales de mes por su jubilación.

El cambio más visible de esta nueva tendencia es el de uno de sus productos más icónicos en España, la fabada Litoral. Lanzan una nueva propuesta “con el 30% menos de grasas y de sal”, en palabras de Dereux. La revisión también incluirá los azúcares añadidos en todo el porfolio, otro de los alimentos que se consideran poco saludables.

Objetivos de facturación

La estrategia de la filial española es que en cinco años, entre el 10% y el 15% del total de la cifra de negocio provenga de propuestas de perfil ecológico. “La ola eco y bio no es una moda pasajera, proseguirá su desarrollo durante un tiempo”, declara el director general saliente. Reber deberá realizar un esfuerzo en este sentido.

Actualmente la línea de comida saludable sólo supone el 2% de la facturación, que alcanzó los 1.028 millones de euros en 2017. Un año en el que las ventas se estancaron --decrecieron el 0,3%-- tras la subida de precios de ciertas referencias por la escalada de costes de las materias primas.

Más exportación

El objetivo para el ejercicio en curso es mantener estas cifras e incrementar las exportaciones, que en el año pasado alcanzaron el 29% de los ingresos. También deberán cesar la poca fabricación para terceros que aún mantienen.

La apuesta de los productos bio implica la sustitución de las referencias menos populares. “Por cada tres nuevos productos hay dos sustituciones”, reconoce Dereux. La oferta que se diversifica en el ejercicio en curso incluye una nueva línea de alimentación orgánica infantil, la gama Naturnes Bio; más cápsulas de Nescafé Dolce Gusto y café molido de la marca Bonka; y tomate frito Solís con ingredientes 100% vegetales. Además de lanzar un nuevo Kit-Kat ruby cocoa beans, que es de color de rosa por el tipo de cacao que se usa.

Inversiones

La multinacional rebajará las inversiones en España en 2018. Se pasará de los 83 millones del ejercicio pasado a tan sólo 42 millones. Esta reducción se explica principalmente por el fin de las obras en la factoría dedicada al café en Girona, que se han prolongado tres años. El 85% de esta cantidad irá destinada a factorías y el otro 10% a mejorar la operativa interna.

Nestlé España también deberá destinar esfuerzos para completar la cadena de certificaciones necesarias para alcanzar el sello de productor bio. Los portavoces de la compañía explican que se trata de un proceso burocrático con una complejidad administrativa alta. Cada autonomía cuenta con requisitos propios. La multinacional espera completarlo en el menor tiempo posible.