Imagen de una trabajadora de La Sirena, el grupo de distribución de ultracongelados que ha cerrado 2018 con más facturación pero aún en pérdidas / LA SIRENA

Imagen de una trabajadora de La Sirena, el grupo de distribución de ultracongelados que ha cerrado 2018 con más facturación pero aún en pérdidas / LA SIRENA

Business

La Sirena vende más pero dispara sus pérdidas un 32%

El grupo de distribución de ultracongelados nombra a un nuevo director general, Jorge Benlloch

7 diciembre, 2018 12:03

La Sirena ha conseguido en su ejercicio fiscal 2017-2018, cerrado en abril, incrementar la facturación de la compañía el 2,5% hasta los 149,8 millones de euros. El avance positivo y los beneficios brutos (Ebitda) se sitúan en los 8,4 millones de euros, pero no ha sido suficiente para dejar atrás los números rojos que arrastra desde hace años. De nuevo, la empresa propiedad de OpCapita presenta un cierre con unas pérdidas notorias. Alcanzan los 5,6 millones de euros, el 32% más que los últimos resultados que presentó

Para intentar dejar atrás los malos resultados se ha aprobado un cambio de dirección general. Jorge Benlloch asume este cargo desde el pasado 3 de septiembre. Se ha instalado en Barcelona tras su paso por Organización Soriana, una cadena de distribución mexicana cotizada.

Renovación de la marca

El ejecutivo impulsará el “proceso de transformación” en el que está inmerso La Sirena. En un momento en el que los ultracongelados han caído en popularidad, el grupo ha iniciado una renovación de la marca. Asegura que se ha cambiado la “imagen de las tiendas” y apuesta por la “innovación y creatividad de la oferta de productos”.

Los resultados actual no alcanzan las cifras del mejor momento de la compañía, poco antes de que Agrolimen la vendiese al fondo de capital riesgo británico 3i (fue fundad por las familias Solé y Cernuda). Con todo, los portavoces señalan que el “balance de la situación es el más saneado de los últimos 12 años”.

Préstamo participativo de OpCapital

Ayuda a esta realidad que OpCapita, el fondo que pagó 155 millones de euros por la compañía en diciembre de 2014, haya reconvertido la tipología de los seis millones de euros que le adeuda la compañía. Ahora es un préstamo participativo, hecho que otorga oxígeno a la operativa de La Sirena.

El grupo adeudaba 13,5 millones de euros al cierre del ejercicio fiscal. Este pasivo financiero se considera suficiente para soportar el plan de aperturas de tiendas actuales. En los últimos dos años ha abierto 16 establecimientos. Actualmente cuenta con una red de 250 puntos de venta.