Imagen de una retención de vehículos en la ciudad de Barcelona / EFE

Imagen de una retención de vehículos en la ciudad de Barcelona / EFE

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Cataluña cobrará a partir de febrero el impuesto a las emisiones de los vehículos

La Agencia Tributaria anuncia el calendario del tributo de nuevo cuño que se rechaza desde el sector y que propiciará a la Generalitat unos ingresos de 77 millones anuales

6 septiembre, 2018 09:58

La Agencia Tributaria de Cataluña ha informado a las patronales automovilísticas del territorio que a partir de febrero empezará a cobrar un impuesto de nuevo cuño que gravará la circulación de vehículos, tal y como informa Coche Global. El gravamen de la Generalitat tiene un enfoque medioambiental, ya que se tributará las emisiones de CO2.

Lo deberán pagar los propietarios de coches, motos y furgonetas, que recibirán en los próximos meses una carta con los detalles de este “impuesto sobre las emisiones de dióxido de carbono de los vehículos de tracción mecánica”. El sector calcula que pagarán de media unos 80 euros anuales para la mayoría de los turismos. Para los conductores profesionales, con vehículos más contaminantes, implicará devengos de hasta 300 euros.

Flotas de vehículos

Este importe tendrá un impacto destacado en los operadores de flotas de vehículo. De hecho, las propias asociaciones sectoriales advierten de que ya se han empezado a dar deslocalizaciones de matriculaciones. Las grandes compañías del sector eludirían de este modo el devengo del tributo.

La Federación Catalana de Vendedores de Vehículos de Motor (Fecavem) ha advertido que el “anuncio de la entrada en vigor” de este impuesto “reposiciona el mapa de empresas en toda España en detrimento de Cataluña”. Señalan una pérdida de competitividad en este sentido.

Ley catalana contra el cambio climático

El consejero de Territorio, Damià Calvet, anunció en julio que el Gobierno catalán quería empezar a recaudar este gravamen a partir de 2019. Se debería de haber aplicado en enero de 2018, ya que es uno de los tributos que diseñó Oriol Junqueras cuando era vicepresidente de la Generalitat, pero el Tribunal Constitucional lo paralizó. Formaba parte de la ley catalana contra el cambio climático.

Calvet reconoció que la Generalitat espera recaudar 77 millones con este peaje. Se destinará a sufragar dos nuevos fondos. El primero estará centrado en la lucha contra el cambio climático y el segundo en preservar el patrimonio natural.

Exenciones

El diseño inicial del gravamen preveía la exención de los vehículos con unas emisiones por debajo de los 95 gramos de CO2 por kilómetro recorrido. A partir de ahí, se imponía una tasa que iba de los 0,70 a los 1,40 euros por cada emisión.

No deberán pagar la tasa los vehículos diplomáticos, de administraciones, ambulancias y los transportes de personas con movilidad reducida.