La Iglesia y clubes cannábicos se 'cuelan' en las ayudas del Govern a las pymes

Lo consigna la resolución de adjudicación de las ayudas para pequeñas y microempresas con trabajadores en ERTE dirigidas a mantener los puestos de trabajo, una convocatoria dotada con 208 millones de euros hasta marzo. En teoría, la línea de apoyo se dirige a firmas con menos de 50 empleados y una facturación anual inferior a 10 millones de euros. En la práctica, colectivos de todo tipo han tratado de colarse en la convocatoria, según el documento de asignación al que ha accedido este medio. 

La iglesia del Tibidabo o el club cannábico del Gótico

Ejemplo de ello es el Templo Sagrado Corazón de Jesús Cumbre del Tibidabo de Barcelona, que ha acudido a la ayuda pese a no ser una empresa. El Govern y el Consorcio de Comercio, Artesanía y Moda de Cataluña, que ha vehiculado la línea de pagos, lo han vetado por "no tener la consideración de empresa". La misma razón ha esgrimido la Generalitat de Cataluña para excluir a la Parroquia de Santa María Mitjancera, en el Eixample, o el monasterio de Sant Pere de les Puel·les. Les ha pedido la liquidación del IAE porque no los ve empresas. 

O un abanico de clubes cannábicos que han tratado de buscar apoyo gubernamental por la caída de socios, pese a que no rigen cierres específicos gubernativos sobre estas sociedades como sí ocurre con la hostelería. Son, por ejemplo, el 059 Social Club, situado en la calle Sant Antoni Maria Claret, la Asociación Blow, el club cannábico del Gótico; el club The Back Yard, en la calle Calabria, o la Asociación Cannábica Santa María, situada en Cornellà de Llobregat. 

Una peña del Barça y un club de fútbol

Asimismo, han pedido amparo económico a la Administración autonómica la Penya Barcelonista de Vilanova o la Gran Penya de esta misma localidad, dos locales deportivo-culturales que, de nuevo, tampoco cumplen con los criterios que fija el Govern. 

También se han dirigido a la Generalitat de Cataluña instituciones como la Unió Esportiva Taradell, pero el Gobierno catalán ha sido inflexible, al menos en esta convocatoria. 

Hostelería y restauración, protagonistas

Los que sí han entrado en el reparto de micropagos son, como es lógico tras un año con una fuerte caída de facturación, las empresas turísticas y de alojamientos para visitantes. Han solicitado un pequeño sostén al Govern cadenas como Axel Hotels, Abba Hotels, Acta Hoteles, Aqua Hotel Group, Bestprice, City Hotels o Evenia. 

Por su parte, cientos de restaurantes han acudido también al ofrecimiento de apoyo de la Generalitat de Cataluña, así como clubes de golf, como el Empordà Golf Club, ahora propiedad de Emesa, la patrimonial de Emilio Cuatrecasas. Son todos negocios afectados por el parón del turismo por las restricciones de movilidad y actividad económica derivadas de la pandemia. 

"El 'roto' se verá con las de más de 10 millones"

Fuentes sindicales han aclarado que la primera ronda de ayudas trimestrales del Govern deja algunos datos curiosos, sí, pero también un impacto mayúsculo sobre la hostelería y la restauración catalanas. Las mismas voces han avisado, no obstante, que las grandes cadenas están utillizando sociedades menores para lograr tantas ayudas como puedan. "También hay fondos de inversión camuflados en sociedades instrumentales", alertan. 

Sea como fuere, la magnitud del agujero de la crisis económica y sanitaria sobre la industria vacacional y alojativa catalana se verá cuando el Govern publique las ayudas a las empresas que facturan más de 10 millones de euros al año, avisan las mismas voces. Será entonces cuando se verá qué hoteleras catalanas están más afectadas. Por lo pronto, grandes hoteles como el Fairmont Juan Carlos I o cadenas como NH Hotel Group, como avanzó este medio, ya han anunciado que pasan de los ERTE al ERE, o que presentan preconcurso de acreedores.