El Tribunal Supremo ha condenado a Gas Natural Fenosa por la muerte de cinco personas a causa de una explosión en Tarragona ocurrida en noviembre de 2005. El fallo, que se ha comunicado a las partes este miércoles, considera a la cotizada responsable civil del fatal suceso y le impone el pago de una indemnización de 2,1 millones de euros a los afectados de forma solidaria con Mapfre.
El siniestro tuvo lugar tras la acumulación de gas en una vivienda. Además de la muerte de cinco personas (el ocupante del piso, una madre y sus tres hijos), la deflagración propició lesiones a un viandante y daños materiales en tres vehículos.
Responsabilidad
La resolución judicial indica que la compañía tiene la carga de la prueba para demostrar que no tuvo ninguna responsabilidad en el accidente. Como los responsables de distribución de Gas Natural no lo hicieron, debe abonar los pagos de la compensación económica. Mapfre asumirá su parte dentro de los límites del seguro contratado.
Tanto la sentencia de primera instancia como la dictada por la Audiencia de Tarragona habían exonerado en un primer momento al grupo y a su aseguradora. Afirmaron que no se había acreditado que la fuga de gas se debiera a un defecto de instalación. El recurso de casación ha cambiado el sentido de la resolución.
Sentencia firme
El Supremo decreta que, en función del principio de responsabilidad por riesgo, es obligación de quien presta el servicio generador del riesgo acreditar el verdadero origen del siniestro. Si no es así, como ha ocurrido en este caso, considera que debe asumir la responsabilidad civil del suceso.
Solo se podría eludir si existiera total incertidumbre sobre las causas del siniestro. Un extremo que no se da en la cuestión analizada. Gas Natural deberá acatar la resolución del alto tribunal. Se trata de una sentencia en firme ante la que no cabe presentar ningún recurso de reposición.