Artur Carulla, expresidente de Agrolimen y de Gallina Blanca / EFE

Artur Carulla, expresidente de Agrolimen y de Gallina Blanca / EFE

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Gallina Blanca renueva su cúpula con la salida de Artur Carulla

Ignasi Ricou, hasta ahora consejero delegado de GB Foods, pasa a ocupar la presidencia, al tiempo que se produce cambio de consejeros

24 julio, 2020 00:00

Cambios en Gallina Blanca. Artur Carulla Font deja la presidencia de la compañía y en su lugar entrará el hasta ahora consejero delegado de GB Foods --como ahora se denomina la empresa--, Ignasi Ricou. El cambio viene acompañado de otros movimientos en la cúpula con el nombramiento de nuevos consejeros.

Artur Carulla Font, hasta ahora presidente de GB Foods, es también el encargado de pilotar Agroalimen junto a su hermano Lluís. El grupo posee filiales icónicas como la propia Gallina Blanca y la marca de alimentos para mascotas Affinity.

Cambios en la dirección

Ahora, la filial de Agroalimen, GB Foods, trata de dar un giro a su estrategia con la salida de Carulla de la presidencia y la entrada de Ricou, que ocupa el cargo de CEO desde agosto de 2012. Junto al máximo responsable del grupo, también dejan la empresa los consejeros Joan Cornudella y Manuel Gálvez, que también ejercía como secretario, según ha publicado el registro mercantil.

Los nuevos nombramientos, además de Ricou, son los consejeros Xavier García Bosch, director ejecutivo de GB Foods, y Eduardo Mesegué, que también realizará las labores de secretario. Desde Gallina Blanca no han realizado declaraciones a este medio sobre los cambios en la dirección.

Refuerzo familiar en Agroalimen

Ya el pasado agosto la familia Carulla afianzó el desembarco de la tercera generación al frente de Agroalimen. En concreto, Artur Carulla Mas y Arnau Carulla Cuito, hijos de Artur y Jordi Carulla Font, que accedieron al consejo de administración, como ya explicó Crónica Global entonces. Ambos estaban ya vinculados a la empresa familiar desde hace una década, cuando se incorporaron al órgano asesor creado para el control del grupo.

También fue el verano pasado cuando se produjo un hecho histórico en Gallina Blanca con el cierre de la fábrica de Sant Joan Despí (Barcelona). La compañía ha destinado ahora la producción de sopas instantáneas al centro de Ballobar (Aragón).