La ciudad canadiense de Toronto, donde FCC y ACS pugnarán por un jugoso contrato de infraestructuras de transporte / EP

La ciudad canadiense de Toronto, donde FCC y ACS pugnarán por un jugoso contrato de infraestructuras de transporte / EP

Business

FCC y ACS pelearán por un metro ligero subterráneo en Canadá de 3.000 millones

Las compañías españolas pujan por la construcción de un trazado de unos 10 kilómetros, más de la mitad del cual discurre bajo la ciudad de Toronto

8 agosto, 2020 00:00

Grandes compañías españolas de infraestructuras pelearán por participar en los ambiciosos planes de expansión del transporte público de Toronto, en Canadá. En concreto, FCC y ACS se disputarán uno de los contratos más jugosos, el relacionado con la extensión de una línea de metro ligero de la capital de la provincia de Ontario, valorado en unos 4.600 millones de dólares canadienses (unos 3.000 millones de euros, al cambio actual).

Ambos grupos lideran sendos consorcios que acaban de ser seleccionados por las autoridades de transporte locales para que presenten sus ofertas definitivas en un proceso de licitación que se prolongará durante lo que resta de año.

Un túnel de 6 kilómetros

El proyecto contempla la construcción de algo más de 9 kilómetros adicionales de la línea de metro ligero conocida como Eglinton Crosstown West con el objetivo, entre otros, de llevar el trazado hasta el aeropuerto internacional Pearson.

Uno de los aspectos más complejos de la obra es que dos terceras partes del trazado nuevo discurrirán bajo la superficie de la ciudad, a través de un sistema de doble túnel. Esta peculiaridad hace incluso que, frente a lo que suele ser habitual en este tipo de procesos, el contrato no incluya la construcción de las siete estaciones a lo largo de la línea.

Socios italianos

Dichas estaciones formarán parte de una licitación adicional, que incluirán los sistemas de comunicaciones en los túneles y su mantenimiento. Igualmente sucede con una posible extensión adicional de la línea, sobre la que aún no se ha tomado una decisión definitiva.

Para tratar de adjudicarse este llamativo contrato, FCC acude en un consorcio que comparte con las italianas Salini Impregilo y Astaldi, esta última a través de su filial en Canadá. Las tres se encargan tanto de liderar y gestionar la oferta como de la construcción de la línea, en el caso de que resulten adjudicatarias. Como socio para la ingeniería del proyecto aparece Aecom, también mediante su filial canadiense.

Consocio local

Por su parte, ACS también participa en este proceso con un socio italiano, Ghella, una de las mayores especialistas del mundo en infraestructuras de túneles. El grupo que preside Florentino Pérez está presente en el consorcio con la unidad canadiense de Dragados, que se encarga tanto de la gestión como de la parte de la construcción.

En este caso, el apartado de la ingeniería corre a cargo de la también española Typsa, mientras que del diseño financiero de la oferta se encargarán ACS Infraestructure Canada, Scotiabank Capital y la propia Ghella. Ambos grupos con componentes españoles disputarán la licitación a un tercer consorcio, en este caso liderado por las locales EllisDon y Barnard.