La alcaldesa Ada Colau y el 'conseller' Ramon Tremosa junto a los directivos de la Fira hoy en el recinto de Montjuïc / EP

La alcaldesa Ada Colau y el 'conseller' Ramon Tremosa junto a los directivos de la Fira hoy en el recinto de Montjuïc / EP

Business

La facturación de Fira Barcelona se desploma el 63% en el año del Covid

La institución prevé facturar solo 82 millones en 2020 y descarta retirar el ERTE antes del segundo trimestre de 2021

18 diciembre, 2020 14:00

La Fira de Barcelona espera cerrar el 2020 con unos ingresos de 82 millones de euros en un año marcado por la pandemia. La cifra supone una caída del 63% en la facturación con respecto a 2019, cuando se ingresaron 220 millones de euros, una cantidad que había vivido sucesivos aumentos en los últimos años.

Los beneficios brutos (Ebitda) se situarán en los 100.000 euros. Para poder sufragar los costes de los eventos de este año, muchos de ellos virtuales, la institución ferial ha acordado con la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona recibir una aportación presupuestaria mayor, que aún se está negociando, pero podría ascender a los 10 millones de euros, cuatro veces más de lo habitual.

Regreso del Mobile

El plan con el que trabaja la Fira es que la actividad se mantenga “a la espera” durante el primer trimestre de 2021, pero que pueda retomarse a partir de abril. La reactivación llegará después de Semana Santa con la celebración del Saló de l’Ensenyament. También están en la agenda el evento de Integrated Systems Europe (ISE), el salón Alimentaria y, en junio, el festival Sónar Barcelona.

Incluso está calendarizada la vuelta, si no hay sorpresas, del MWC, que tuvo que cancelarse este año. Una cancelación que Ada Colau, presidenta del Consejo General de Fira, tachó en su momento de “injusta”, aunque hoy la alcaldesa ha reconocido en la presentación de resultados que la decisión “finalmente se demostró como acertada”.

Retirar el ERTE

Una plantilla de 400 personas, trabajadores de la organización, se ha visto afectada por el parón de actividad por el ERTE que tienen activo. La Fira ha avanzado que intentará retirarlo el próximo año, aunque ha descartado hacerlo durante el primer trimestre.

“El primer interesado en poder retirar el ERTE soy yo, pero tenemos que esperar a tener mayor visibilidad”, ha asegurado Constantí Serrallonga, director general de la institución. Serrallonga ha señalado que su voluntad es “poder ir retirándolo” a medida que vuelva la actividad según la evolución de la pandemia: “Somos flexibles”, ha dicho.

'Problemas' de agenda

La recuperación total de la actividad de los congresos internacionales no se prevé hasta de aquí casi un año, en otoño de 2021. De hecho, las previsiones de facturación tampoco son buenas: se espera que los ingresos sean el año que viene de 125 millones de euros, cerca de la mitad de lo recaudado hace un año.

Serrallonga ha asegurado, sin embargo, que las expectativas para el último trimestre del año son mucho mejores: “En octubre vamos a todas, de hecho tenemos problemas de calendario para meter toda la actividad prevista”, ha asegurado.

Renovación del MWC

Otra batalla pendiente para la Fira es renovar la celebración del MWC en Barcelona más allá de 2024, año que marca el acuerdo vigente con la organizadora del evento tecnológico internacional, la GSMA. Esto se negociará después del MWC del 2021, pero un factor clave será la ampliación de Fira Gran Via.

El proyecto supondrá una inversión de 380 millones de euros para construir un nuevo pabellón con el que las instalaciones feriales pasarán de ocupar 240.000 metros cuadrados a 300.000. Solo hay tres recintos más en Europa con dimensiones similares.

Plazos de obra

Fira apunta que pese a la caída en la facturación prevista en 2020 y 2021, “sigue el plazo previsto”, de manera que el proyecto ya se está tramitando y la inauguración podrá hacerse en 2024. Los responsables de la organización han agradecido a las administraciones su aportación económica que permitirá el cumplimiento del calendario.

De hecho, Ramon Tremosa, consejero de Empresa, también presente, ha querido reconocer a Colau la rápida coordinación entre sus respectivos equipos para prestar el apoyo financiero: “Un agradecimiento de verdad y esperamos que vaya a más, que podamos colaborar más y mejor en el futuro”, ha propuesto. Pero esa aportación pública tendrá retorno, según Pau Relat, presidente del Consejo de Administración de Fira. El directivo ha destacado el papel que tendrá la institución en el próximo año, ya que a su juicio deberá “actuar de motor de reconstrucción de la economía del país”.