Ursula von der Leyen, Presidenta de la Comisión Europea, preside la reunión semanal de la Comisión von der Leyen / EUOPRA PRESS

Ursula von der Leyen, Presidenta de la Comisión Europea, preside la reunión semanal de la Comisión von der Leyen / EUOPRA PRESS

Business

España e Italia suman el 35% de la deuda de la eurozona en plena subida de tipos

Inquietud en la Comisión Europea ante las alzas de los costes de financiación, dado que ambos países son los que más tienen que pagar para colocar sus bonos

23 octubre, 2022 00:00

El elevado endeudamiento público que registran España e Italia ha encendido las alarmas en la Comisión Europea, en un entorno macroeconómico complicado ante la más que posible recesión que se cierne sobre las principales economías. Ambos países acaparan nada menos que el 35% del total de la deuda de la zona euro al cierre del primer semestre del año.

En la primera mitad del año, la deuda de los estados que componen la Unión Europea Monetaria (UEM), los que comparten la divisa única, ha batido su récord histórico al situarse por primera vez por encima de los 12 billones de euros, según los datos publicados por la agencia europea de estadística, Eurostat.

Máximos históricos

Paralelamente, el Banco de España ha hecho público el dato de deuda pública nacional, correspondiente en este caso al mes de agosto, que prosigue su camino imparable hacia la cota de 1,5 billones de euros y que también ha marcado un registro inéditamente elevado, concretamente 1,491 billones de euros.

En términos relativos al volumen del Producto Interior Bruto (PIB), España es el segundo país de la eurozona con mayor endeudamiento, que representa aproximadamente el 117% de la producción de los últimos doce meses. Por encima, tan sólo se sitúa Italia, con una cifra que se va por encima del 155% de su PIB. 

En el seno de la Comisión Europea genera inquietud el hecho de que dos de las cuatro grandes economías de la zona euro acaparen un 35% de su deuda total, aunque representan algo menos de la cuarta parte del PIB conjunto de los países que comparten el euro, que se sitúa aproximadamente en 12,3 billones de euros. 

Especialmente alarmante resulta esta situación en una etapa en la que el ciclo económico apunta a una más que probable recesión, aunque de corto recorrido, debido a los efectos de la invasión rusa de Ucrania y las tensiones inflacionistas que se arrastraban de antes y que se han visto aumentadas y aceleradas por el conflicto bélico.

Subidas de tipos

Tales circunstancias han llevado a los principales bancos centrales de todo el mundo a mover ficha antes y con más intensidad de lo esperado, algo a lo que no ha sido ajeno el Banco Central Europeo (BCE), que ya ha elevado los tipos de interés en la zona euro 125 puntos básicos en dos revisiones. 

Las alarmas en el seno comunitario están justificadas por el hecho de que, como consecuencia de estas subidas del precio oficial del dinero más las que están por llegar para tratar de controlar los precios, el coste de la financiación de ambos países se ha disparado. 

Elevados costes

Sin ir más lejos, en el caso de España el bono de referencia a diez años ha elevado su rentabilidad en torno a los 300 puntos básicos desde el inicio del año; su rentabilidad en el mercado secundario ya se ha situado en el entorno del 3,6%, una cifra que no era tan elevada desde comienzos de 2014. 

Por su parte, el bono italiano ha elevado su rendimiento hasta el 4,75%, cerca de 3,6 puntos por encima de los registros de cierre de 2021. 

La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde / BCE

La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde / BCE

Evitar problemas en el mercado

Son los países con un mayor coste de financiación de la zona euro, sólo por debajo de Grecia, aunque la economía helena presenta un endeudamiento relativo menor. 

Los temores de las autoridades europeas residen en que la subida de tipos haga que la rentabilidad de los bonos español e italiano se disparen y ambos países empiecen a encontrar dificultades para colocarlos en el mercado.

Mecanismos del BCE

Durante la pandemia, ambos se vieron especialmente protegidos por los mecanismos puestos en marcha por el BCE para evitar que el Covid-19 provocara una nueva crisis de deuda como la vivida desde finales de la primera década del siglo. 

Las compras de bonos por parte del emisor evitaron males mayores; tras el fin de los llamados planes de estímulo, el BCE activó otras herramientas para evitar que las primeras subidas de tipos de intereses provocaran en ensanchamiento en los diferenciales de deuda, esto es, las primas de riesgo. 

Más gasto público

Sin embargo, estas medidas no podrán mantenerse eternamente mientras que la deuda de ambos países no hace más que incrementarse y contribuir a los máximos históricos de la zona euro. Bruselas insiste en solicitar a ambos la adopción de medidas estructurales para rebajar la cifra. 

Por lo pronto, la respuesta del Gobierno español ha sido la presentación de un nuevo Presupuesto expansivo para 2023 mientras que en Italia se espera conocer en detalle el programa del nuevo Ejecutivo producto de las elecciones celebradas recientemente.