Antonio Hernández Callejas, presidente de Ebro Foods y miembro de la familia fundadora y primera accionistas del grupo / EP

Antonio Hernández Callejas, presidente de Ebro Foods y miembro de la familia fundadora y primera accionistas del grupo / EP

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Los dueños de Ebro Foods salvan su sicav de 375 millones de euros

La familia Hernández opta por mantener en este régimen su sociedad de inversión, una de las mayores de este tipo, frente a la avalancha de disoluciones por el cambio de normativa

28 enero, 2022 00:00

La nueva normativa que reducirá de forma drástica las ventajas fiscales de las sicav va a acabar prácticamente con dos tercios de las hasta ahora registradas en España, pero no será el caso de las de mayor volumen bajo gestión. Entre ellas, Soixa, controlada por la familia Hernández, herederos de los fundadores de la actual Ebro Foods y primeros accionistas de la cotizada alimentaria.

Soixa es una de los grandes vehículos de este perfil por volumen bajo gestión. El valor de su cartera al cierre del tercer trimestre de 2021, último dato registrado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), asciende a algo más de 375 millones de euros. A mediados de este mes, su consejo de administración tomó la trascendental decisión de que la sociedad siguiera adscrita al régimen bajo el que ha operado hasta la fecha, en medio de la desbandada generalizada de este tipo de sociedades, la mayor parte de las cuales está optando por la liquidación o la transformación en otro tipo.

Sociedades al 1%

Nacida de la fusión de cerca de una decena de pequeñas sicav pertenecientes a las diversas ramas familiares de los Hernández Callejas y los Hernández Barreras, Soixa cumple con el requisito de superar la cifra de 100 accionistas con una participación suficiente para ser considerados como cualificados.

De esta forma, la sociedad podrá seguir beneficiándose de ventajas fiscales como el tipo del 1% aplicado en el impuesto de Sociedades, que perderán aquellas mercantiles de este tipo que no cumplan con el precepto citado.

Desbandada de sicavs

De ahí que los principales socios de Soixa hayan optado por dotar de estabilidad a la sociedad y continuar operando en un régimen que les va a seguir beneficiando desde el punto de vista fiscal.

Buena parte de las sicav más pequeñas no cumple con la condición de contar con un mínimo de 100 accionistas con una participación que sea algo más que testimonial para justificar su condición de sicav. De este modo, aprovechan el periodo transitorio del que disponen hasta finales de febrero para disolverse o pasar a ser mercantiles convencionales.

División de la herencia

Sin las ventajas fiscales, carece de sentido estar bajo un régimen que exige una serie de gastos como la gestión, la cotización en bolsa y, además, deberes de transparencia como rendir cuentas con periodicidad trimestral ante el supervisor.

Hace unos años, la familia Hernández dividió la participación heredada de los fundadores de Ebro Foods entre la rama de los Hernández Callejas, a la que pertenece Antonio, el actual presidente de la compañía, y de los Hernández Barreras, cuya segunda generación está ahora al pie del cañón de los negocios.

La fundadora de Magallanes

Una de sus miembros más destacados es Blanca Hernández Rodríguez que, además, es una de las fundadoras de la gestora Magallanes y actual consejera delegada. Como no podía ser de otra forma, Blanca Hernández también está al frente de Soixa, de cuya gestión se encarga la entidad que fundó junto a Iván Martín.

El componente principal de la cartera de esta sicav es precisamente su apuesta por la industria de la inversión. Algo más de 100 millones de euros se encuentran invertidos en fondos y productos de Magallanes pero también de Cobas, la sociedad creada por Francisco García Paramés, sin duda el gestor español más destacado de las últimas décadas, tras su sonada marcha de Bestinver, filial de Acciona.

Crecimiento exponencial

Los lazos entre Cobas y Magallanes son numerosos. Detrás de esta última también está la figura de una estrella de la gestión en España, el anteriormente mencionado Iván Martín. Tras ser fichado hace aproximadamente una década por Santander a bombo y platillo, apenas permaneció durante dos años en la gestora del banco que ahora preside Ana Botín para embarcarse en su propio proyecto junto a Blanca Hernández.

Con una cartera inicial de unos 30 millones bajo gestión, tres años después Magallanes se convirtió en una de las gestoras españolas independientes capaz de superar la barrera de los 1.000 millones.

Una de las grandes fortunas

La familia Hernández forma parte del selecto grupo de grandes fortunas españolas. Su participación en Ebro Foods está valorada en unos 415 millones de euros a precios actuales de mercado.

Además de productos de la industria de inversión, la cartera de Soixa también está compuesta por pequeñas participaciones en cotizadas, tanto españolas como internacionales. Las posiciones en bolsa española rondan la veintena y la más voluminosa está en ArcelorMittal, con un valor de algo más de 11 millones de euros. ING, Renault y Porsche figuran entre las principales participaciones en bolsa internacional.