Sede corporativa de Cuatrecasas en Barcelona / CG

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Business

Los problemas del líder de la abogacía catalana para mantener su primacía

Cuatrecasas lidia con las heridas del 'procés' en la economía y la crisis del Covid en la etapa posterior a la salida de su presidente de honor, que impulsó el bufete

7 junio, 2021 00:00

Son los retos, problemas u oportunidades, según la fuente, a los que se enfrenta Cuatrecasas, el líder de la abogacía catalana, para mantener su hegemonía en la región. El bufete total de abogados lidia con las heridas abiertas del procés en Cataluña y, ahora, la crisis del Covid en los años posteriores a la salida de su presidente de honor. Por su parte, el grupo legal pone en valor sus cifras de cuota de mercado y económicas para reivindicarse como el "primero en Cataluña, y a mucha distancia", y presumir de crecimiento en sus magnitudes económicas. 

Diversas fuentes del sector de la abogacía relevantes y no vinculadas entre sí en conversación con este medio matizan esa versión. Por lo pronto, sitúan a Cuatrecasas en la gran tormenta empresarial patria provocada por la pandemia. "La mortalidad mercantil, la que ya ha llegado y la que se espera a final de año, se ha cebado más con los despachos especializados en este campo", indican. No es un frente en el que el despacho se encuentre solo: comparte trinchera con sus rivales. 

La pandemia lo cambia todo

¿Qué provoca el Covid en la abogacía regional? "Problemas, y más para los grandes. Se pierden cuotas, algo esperado cuando los derrumbes de empresas han alcanzado un volumen importante. Y los administradores negocian minutas lo más bajas posible", informan las voces consultadas. Ello perjudica a los grandes despachos, incluido Cuatrecasas, "pues tienen estructuras de costes mayores y les cuesta más ajustar tarifas para las firmas en insolvencia", relatan. 

De hecho, algunos bufetes han llegado a crear estructuras paralelas para dar servicio a las empresas que se hallan en apuros. "Te ofrecen un precio y, si no llegas, te derivan a un despacho asociado más pequeño que te lo ajusta aún más. Se ha convertido en una práctica común", ilustran otros profesionales consultados. 

Las heridas del 'procés'

La crisis económica derivada de la sanitaria, pues, ha golpeado el tejido empresarial y, por ende, a los grandes despachos de abogados. Pero es que grupos legales como el sito en el número 191 de la avenida Diagonal de Barcelona ya partían de una situación compleja antes de la pandemia. "Si se han marchado 5.000 empresas de Cataluña por la inestabilidad política, por aproximar una cifra, de las cuales cerca de 4.000 de Barcelona ciudad, imagina cuántas cuotas mensuales perdidas son eso para los grandes bufetes", alertan las mismas voces. 

¿No es un problema común para todos los despachos? "En el caso del líder de la abogacía catalana, el procés embistió la seguridad jurídica tras la salida de su presidente. Cuatrecasas tuvo que navegar la fuga masiva de compañías sin el abogado [Emilio Cuatrecasas] que agigantó el bufete desde su tamaño mediano hasta convertirlo en uno de los campeones nacionales", explican las mismas fuentes. 

Problemas endémicos del sector

El relevo del empresario al frente del coloso jurídico catalán tras su choque con Hacienda, y su relevo por Pedro Fontana, sembró dudas sobre la capacidad de la firma de mantener su influencia. Abogados conocedores de la situación interna dan por descontada cierta pérdida de capacidad del despacho de contribuir a moldear del debate público, por cuanto su presidente de honor se ha centrado en su faceta de inversor. "No hablamos de cuota de mercado o cifras a cierre de año, pues todo ello queda sobre documento, se trata de un intangible: la influencia", indican las voces consultadas. 

A ello se le unen los males endémicos del sector. "No se trata de Cuatrecasas, o solo de Cuatrecasas. Se conoce que en el campo legal se dan demasiado a menudo largas jornadas laborales por sueldos muy ajustados, pasantías casi gratis o gratis y los temidos análisis de rendimiento con KMLEON --un programa especializado en gestión de bufetes--, que analiza la calidad de nuestros escritos", se queja un letrado de a pie. "Muchos letrados se queman de los grandes y acaban montándoselo por su cuenta", añade. En este escenario, pero en la zona noble de la Torre Cuatrecasas, se produjo la salida en mayo de Fernando Cerdá a Pérez-Llorca, que avanzó El Confidencial. Cuatrecasas la enmarca en la habitualidad de movimientos entre grandes despachos y niega reestructuración alguna. El sector las ve infrecuentes. ¿Se mueve algo en el titán de la abogacía autonómica? 

"Líderes"

Según una fuente corporativa del despacho, no, al contrario. El portavoz cita las memorias económicas de 2018 y 2019 [consultar aquí y aquí], las últimas publicadas. Los documentos consignan un aumento de ingresos brutos año a año del 12%: de 277 millones en 2018 a 316 millones al año siguiente. Desde la compañía se resalta también que estas magnitudes son consultables en el Registro Mercantil. Y que los movimientos de empresas por el procés no pudieron afectar a Cuatrecasas más que a otro bufete, al contrario, pues el grupo tiene sedes en Madrid, Valencia y Palma, ciudades a las que migraron cientos de mercantiles durante la zozobra económica derivada del órdago secesionista. 

En el capítulo de la cuota de mercado, la voz oficial enfatiza que Cuatrecasas continúa como líder imbatible de la abogacía en Cataluña, y a mucha distancia del segundo, según los rankings que elabora periódicamente Expansión. Los retos de la crisis de la pandemia a los que se puede enfrentar la compañía, apostilla la misma fuente, son los mismos con los que debe lidiar el resto del sector, aunque en este caso desde una posición de primacía, experiencia, prestigio y una red de sedes en España que asegura la diversidad de fuentes de ingresos. Ello, pues, descarta renegociaciones de minutas en la práctica mercantil, como apuntan otras fuentes.