Instalaciones de Construcciones Otero / CG

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Tropiezo de Construcciones Otero

La empresa de Granada insta un procedimiento judicial de insolvencia con 20 millones de pasivo

21 enero, 2020 00:00

Ladrillazo en el sur de España. El Juzgado Mercantil número 1 de Granada ha declarado en concurso de acreedores a Construcciones Otero, cuyo cuartel general reside en el parque empresarial Cortijo del Conde de dicha capital andaluza.

El Juzgado ha dispuesto que el deudor conserve sus facultades de administración y disposición del patrimonio. La administración concursal se ha confiado al bufete López y García de la Serrana Abogados.

Fundación en 1956

Según los últimos balances disponibles, las deudas de la empresa se sitúan en el entorno de los 20 millones, con unos activos de similar importe.

Los orígenes de Construcciones Otero hunden sus raíces en 1956, cuando la firma empezó a trabajar en el sector de la construcción. Corriendo el tiempo se especializó en infraestructuras. Hoy sus actividades principales son el ciclo integral del agua, la edificación, la arquitectura sostenible y la eficiencia energética.

Números rojos

Construcciones Otero dispone de oficinas en Sevilla, Málaga, Madrid, Reino Unido, Dinamarca y Marruecos.

En 2018 sus ventas aumentaron de 29 a 39 millones, pero la cuenta de resultados cambió de signo y pasó de 268.000 euros de beneficio a 1,9 millones de pérdida. La compañía está dirigida por Enrique Otero Benet, en calidad de administrador único.

Quiebra otra filial de Abengoa

También en Andalucía, ha acabado en suspensión de pagos Abengoa Greenfield SA, con sede en el cuartel general de Grupo Abengoa en Sevilla.

Esta entidad formó parte de la gigantesca reestructuración de deudas a que fue sometido el grupo andaluz de ingeniería y energías renovables.

Como consecuencia de dicho ajuste, el pasivo exigible de Abengoa Greenfield experimentó una reducción casi total, al pasar de 588 millones a 3 millones.

Liquidación

Una vez saneado el balance, la dirección del grupo entiende que mantener esta empresa no tiene sentido, pues carece de actividad. Por ello ha decidido liquidarla, previo el procedimiento concursal.

El expediente ha recaído en el Tribunal de lo Mercantil de Sevilla, que ya lo ha admitido a trámite y ha nombrado administrador concursal a Ernst & Young Abogados.

El fiasco de Abengoa Greenfield es el cuarto que protagoniza una filial de Abengoa. Antes lo hicieron Abencor, con un agujero de 444 millones; Abengoa PW I Investments, con deudas de 525 millones; y Abengoa Bioenergía Nuevas Tecnologías, con 100 millones de pasivo.