Claudio Boada (Blackstone) suple al expresidente de Atlantia en Abertis

Claudio Boada, la cabeza visible del fondo Blackstone en España, se incorpora al consejo de administración de Abertis, en el que tomará el relevo de Fabio Cerchiai, ya expresidente de Atlantia tras la última junta de accionistas de la empresa italiana, celebrada a finales del pasado abril. 

Los últimos acontecimientos en torno al grupo transalpino y el intento por parte de ACS de hacerse con su autopistas comienzan a tener su repercusión en Abertis, la concesionaria que controlan de forma casi paritaria ambas compañías. 

El apoyo de Benetton

La designación de Boada no resulta en absoluto casual, toda vez que el fondo estadounidense ha sido el apoyo financiero que ha encontrado la familia Benetton, primer accionista de Atlantia, para diseñar una opa defensiva sobre la empresa y proceder a su exclusión de bolsa. 

El nombramiento fue acordado este jueves por el consejo de administración que, además, también convocó una junta extraordinaria para el próximo 28 de junio en la que, además de ratificar a Boada, se aprobará la extensión del número de miembros de los cinco actuales a nueve.

Reparto paritario

El orden del día remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) no especifica la identidad de las personas que serán propuestas para su nombramiento.

Desde que Atlantia y ACS culminaron el proceso de compra de Abertis, ambas sociedades acordaron repartirse de forma paritaria los puestos en el consejo, de modo que cada una cuenta con dos representantes mientras que el quinto es el único ejecutivo, Francisco José Aljaro, que ejerce como consejero delegado. 

Un año en el cargo

De este modo, todo apunta a que con la ampliación del consejo de administración ambos accionistas dispondrán de dos representantes más cada uno en la compañía. En la instrumental con la que ACS y Atlantia controlan cerca del 99% del capital, la compañía italia cuenta con el 50% más una acción. 

En la última junta de Abertis se aprobó que los nombramientos de consejeros tuvieran una validez de un año, lo que también será aplicado a los vocales que se incorporen a partir de la próxima junta.