Gonzalo Gortázar, consejero delegado de Caixabank, en la presentación de los resultados del primer trimestre de 2017 en Barcelona / CG

Gonzalo Gortázar, consejero delegado de Caixabank, en la presentación de los resultados del primer trimestre de 2017 en Barcelona / CG

Business

Caixabank gana el 53,4% más en los nueve primeros meses del año gracias a BPI

La integración de la entidad portuguesa eleva el resultado atribuido hasta septiembre: 1.488 millones de euros

24 octubre, 2017 08:03

Caixabank ha presentado este martes por primera vez en Valencia, nueva sede social de la entidad, unos resultados netos atribuidos de 1.488 millones de euros los nueve primeros meses del año, el 53,4% más que el mismo periodo del año anterior. El avance destacado responde a la integración en las cuentas de BPI, el grupo portugués que adquirió. “Impacta en el evolución interanual de los principales epígrafes de la cuenta de resultados y del balance”, indica el banco dirigido por Gonzalo Gortázar en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). 

Destaca que los beneficios del tercer trimestre son los mayores de la historia, 649 millones (48,7% más que el trimestre anterior) y que el volumen de recursos gestionados en España ha crecido en 11.346 millones.

Recursos de clientes

De forma global, se gestionan 46.119 millones más de clientes del grupo financiero si se compara con el cierre de 2016. De forma global, se alcanzan los 350.014 millones, 34.773 millones de los cuales vienen de BPI.

La entidad lusa que se integró en la contabilidad de Caixabank el pasado febrero asciende a 180 millones al capítulo de beneficios, 103 de los cuales se registraron en el tercer trimestre. 

Intereses

Caixabank indica que el margen de intereses crece el 15,2% hasta los 3.550 millones, cifra que se situaría en un avance del 6,5% si no se tuviera en cuenta la consolidación del BPI. Las comisiones se sitúan en los 1.867 millones, el 20,8% más de forma global y con un crecimiento del 8,2% sin BPI.

El margen bruto alanza los 6.491 millones, un incremento del 9,3% si se compra con el mismo periodo del año anterior que refleja la “incorporación” del banco portugués y la “mayor generación de ingresos del negocio bancario y de seguros”, una actividad clave en la entidad ante el escenario de bajos tipos que ahoga el negocio bancario tradicional.

Ratio de morosidad

La ratio de morosidad se sitúa en el 6,4%, muy por debajo de la media del sector tal y como destaca Caixabank en el comunicado a los inversores, y la de cobertura mejora hasta el 50%. Al cierre de 2016, estaba al 47%.

Los activos líquidos totales se sitúan en los 71.581 millones y el rendimiento del patrimonio tangible (ROTE) alcanza el 8%, un avance de 235 puntos básicos respecto al año anterior. El grupo financiero destaca que su rentabilidad alcanza el 10,5%, con un resultado de 1.490 millones en los nueve primeros meses.

Liderazgo del sector ‘retail’

Caixabank destaca al cierre del tercer trimestre que mantiene el liderazgo en el sector retail en España. Indica que la cuota de penetración como primera entidad se sitúa en el 26,7% (crece en 100 puntos básicos en los últimos 12 meses) y que también es el primer banco por nóminas domiciliadas con una cuota del 26,6%.

Sigue en la segunda plaza de seguros, planes y fondos por recursos gestionados con una cuota del 21,8%. Además de destacar los 5,6 millones de clientes de su banca on line y los 4,1 millones que usan de forma habitual los servicios financieros de su aplicación para dispositivos móviles.

Incertidumbre de la independencia

En clave macroeconómica, la entidad presidida por Jordi Gual señala que el tercer trimestre habría cerrado con un avance del PIB del 3,2%, algo mayor que el del trimestre precedente (3,1%). Un contexto económico que “sigue siendo positivo, a pesar de la incertidumbre derivada de la situación política doméstica”.

Esta es la única mención que hace la entidad al proceso independentista catalán. Cabe tener en cuenta que las cifras que presenta este martes llegan hasta septiembre. El impacto económico de la incertidumbre a partir del 1-O se registrará en la contabilidad del cuarto trimestre del año. Se conocerán el próximo enero.