Josep Balsega, director médico del Memorial Sloan Kettering de Nueva York / mskcc.org

Josep Balsega, director médico del Memorial Sloan Kettering de Nueva York / mskcc.org

Business

Baselga, cuestionado por omitir cobros de farmacéuticas

El oncólogo achaca el no haber informado de conflictos de interés a la falta de supervisión

10 septiembre, 2018 12:13

El director médico del Memorial Sloan Kettering de Nueva York, Josep Baselga, no informó de sus vínculos con empresas farmacéuticas en un centenar de los 170 artículos científicos de los que ha sido coautor entre 2013 y 2017, según 'The New York Times'.

En el artículo, hecho en colaboración de la organización de periodismo de investigación 'ProPublica', el diario estadounidense describe a Baselga como "uno de los médicos más importantes del mundo en cáncer de mama", y una figura destacada del cáncer en el mundo.

Oncólogo de prestigio

"Uno de los mejores oncólogos del mundo no reveló millones de dólares en pagos de las compañías de cuidado de la salud y de fármacos en los últimos años, omitiendo sus lazos financieros a partir de artículos de investigación en publicaciones de prestigio como el 'New England Journal of Medicine' y 'The Lancet", escribe dicho diario.

La investigación acusa a Baselga de no seguir las normas de información financiera establecidas por la Asociación Americana para la Investigación del Cáncer, cuando era presidente del grupo, y de ocultar pagos que recibió de empresas vinculadas a la investigación del cáncer, en su artículo publicado en la revista del grupo 'Cancer Discovery'.

Sus argumentos

En declaraciones a 'La Vanguardia', Baselga admite que fue un error no hacer pública su relación con compañías farmacéuticas en 17 de los estudios. Algo que atribuye a una falta de supervisión por su parte en el proceso final de producción de artículos científicos. Pero "en ningún caso a una voluntad de ocultar información".

Por lo que respecta al 80% de artículos restantes, Baselga sostiene que no era pertinente citar vínculos con empresas, ya que se trataba de investigaciones de ciencia básica o traslacional sin retorno económico a corto plazo.

El hecho de que haya revelado sus relaciones con empresas farmacéuticas en unos 70 artículos, de los 90 en que hubiera debido hacerlo es, a su juicio, una muestra de que las omisiones son un problema de falta de supervisión, pero no de mala intención.