Barcelona promete flexibilidad para aplicar el decreto de la energía

El Ayuntamiento de Barcelona se ha comprometido hoy ante los agentes económicos a tener cierta flexibilidad en la aplicación del decreto nacional de ahorro de luz y gas. Lo han dicho representantes de la Administración local en la presentación de una línea de subvenciones de dos millones de euros para ayudar a la mejora energética del pequeño comercio en la Ciudad Condal. 

Jaume Collboni, primer teniente de alcalde y responsable de asuntos económicos, ha dejado claro ante representantes de los botiguers, sector de la restauración, ocio nocturno y hotelero, afectados por la nueva norma, a que las multas por incumplimiento de este Real Decreto-ley "no serían una prioridad" para la Guardia Urbana. Con ello, arropa a los pequeños comerciantes frente a las sanciones por malgastar energía. 

El ocio nocturno pide "compatibilización"

Ha ocurrido en la sede de la casa consistorial, donde ha tenido lugar un cónclave entre representantes de la Administración local y los agentes económicos para conocer los pormenores de la aplicación del texto en la urbe y los detalles de la nueva línea de ayudas municipal. Durante la reunión, la patronal de ocio nocturno Fecalon ha pedido poder "compatibilizar" el ahorro eléctrico con la actividad del sector. 

La industria catalana de la noche ha recordado los "problemas legales" del decreto, pues la Comunidad de Madrid ya ha recurrido el decreto ante el Tribunal Constitucional (TC). También han subrayado que la norma aún está en periodo de alegaciones por parte de las comunidades autónomas, y que el sector necesita apoyo para implementarlo, pues la refrigeración de las pistas de baile es fundamental. 

Dos millones, por ahora

Por ahora, el gobierno municipal de la capital catalana ha prometido ayuda. El propio Collboni ha presentado una línea de ayuda de dos millones de euros para locales comerciales en planta baja que se verán afectados por la medida.

Desde el bipartito local se enfatiza que Barcelona será así "la primera gran ciudad" de España en "acompañar y apoyar económicamente" los cambios que tendrán que hacer los comerciantes afectados por el plan de choque. 

Cargo a 2023

El programa de apoyo a los botiguers se efectuará con cargo al presupuesto municipal de 2023. Permitirá financiar el 50% de las obras de mejora de eficiencia energética de los establecimientos comerciales en planta baja. 

Las actuaciones tienen un límite de 2.000 euros y el ayuntamiento se ofrece también a ofrecer asesoramiento complementario por medio de la Oficina de Transición Energética de Pimec, la patronal de las pequeñas y medianas empresas.