Inauguración de un Burguer King / CG

Inauguración de un Burguer King / CG

Business

El amo de La Tagliatella quiere llenar Europa del Este de Burger King

El mexicano Carlos Fernández, junto al estadounidense Henry McGovern, fundador de AmRest, pretende aumentar un 50% los locales en dos años para elevar las ventas un 20%

10 diciembre, 2018 00:00

El empresario mexicano Carlos Fernández, el dueño de la cadena de restaurantes La Tagliatella, a través del 56,4% que tiene en el holding de restauración AmRest, no para.

El objetivo está claro, aumentar en dos años un 50% los actuales 2.000 locales con que cuenta el grupo, de los que casi 250 son propios y el resto los gestiona en régimen de franquicia.

Fernández y McGovern apuestan por el Este

Tras haber dado el paso clave en esta expansión, el de iniciar la cotización en la Bolsa española para tener un acceso a los mercados de la zona euro, AmRest acaba de anunciar que otro de los hitos para lograr ese objetivo pasaría por aumentar de manera exponencial la presencia de restaurantes Burger King en Europa del Este, a partir de los 57 que gestiona actualmente en Polonia, República Checa, Eslovaquia y Bulgaria. Nuevas aperturas de la cadena estadounidense de hamburguesas en estos países y también en Rumanía.

Fernández, junto a Henry Mcgovern --fundador del holding de restauración y tenedor del 11% del capital--, tiene clara la apuesta a seguir y el objetivo a alcanzar. La apertura de unos 1.000 nuevos restaurantes que permitan aumentar la facturación y el ebitda en torno a un 20% anual.

Pendiente de la compra de la neozelandesa Brands

La expansión de los Burger King en estos países de la Europa de Este se sumaría a la otra gran inversión que, en estos momentos, AmRest tiene entre manos. Es la adquisición de hasta el 75% de Brands, la cadena de comida rápida neozelandesa, para lo que el holding desembolsaría un máximo de 445 millones de euros. O algo menos, si finalmente la participación adquirida se queda en la banda baja aceptable del 50,01%.

Con la renovada apuesta por el mercado de la Europa del Este, AmRest vuelve a sus orígenes. Los que, en el año 2000, vieron nacer la empresa surgida de la unión entre American Restaurant Services --la sociedad de McGovern y sus socios-- y Yum Brands y que, un año después, adquiría International Fast Food Polska, el operador de Burger King en Polonia. Posteriormente abría, en 2007, su primer restaurante de la franquicia estadounidense en este país. Un año después, firmaba acuerdos de apertura de la enseña Burger King en Bulgaria.

Base de crecimiento orgánico

El anuncio de la cadena de hamburguesas también deja entrever la intención de los propietarios de Amrest --Fernández y McGovern suman el 68%--  de proyectar la expansión futura a base de crecimiento orgánico y saliendo solo de compras ante una oferta excepcional que pueda aparecer por el camino.

En ese sentido, España, convertido en su segundo mercado, resulta clave para el crecimiento futuro en los dos próximos años.

Ruta a seguir en España

En Amrest tienen clara la ruta a seguir en España, que pasaría por expandir la red de los restaurantes Kentucky Fried Chicken (KFC), aprovechando los derechos de la marca para Madrid, Barcelona y la zona norte, abrir más tiendas Sushi Shop, la cadena francesa de comida japonesa por la que acaban de pagar 240 millones de euros, en lo que supone la mayor operación de su historia, y aumentar las aperturas de la cadena de hamburgueserías Bacoa.

La guinda al crecimiento en España la pondrá AmRest con La Tagliatella, el buque insignia del grupo y la marca más conocida. Desde que la incluyeron en 2011, cuando contaba con 90 establecimientos, el ritmo de aperturas ha provocado que, al cierre del presente ejercicio, rocen los 250.

A partir de aquí, el objetivo previsto es llegar a los 300, para lo que, además de proseguir en el mercado de envío de comida a domicilio, se está contemplando la posibilidad de operar en los aeropuertos y de adentrarse en el segmento fast casual, la moda que está haciendo furor en Estados Unidos con menús cortos, sin servicio de mesa, rápidos y a buen precio y en locales agradables.