En un oculto rincón del Born, a pocos pasos de Santa María del Mar, en Barcelona, se esconde este templo del pescado y los crustáceos, donde gambas (a la brasa o al vapor), lubinas, almejas, ostras, rodaballos, chipirones, espardeñas, escórporas y todo lo que se pueda soñar, son trabajados con un mimo inusual y una mano maestra. La carta de Estimar es de esas de las que apetece pedir absolutamente todo, empezando por las aceitunas y las anchoas (con un delicioso pan con tomate con sabor a humo) y acabando por la piña rellena de crema catalana. Una recomendación: las navajas en escabeche suave son para chuparse los dedos. Buena selección de vinos blancos, cavas y champanes, y un servicio amable y atentísimo.