Philippe Valle, consejero delegado de Elior, y la biblioteca del centro de párvulos del Liceo Francés de Barcelona.

Philippe Valle, consejero delegado de Elior, y la biblioteca del centro de párvulos del Liceo Francés de Barcelona.

Vida

Elior mintió sobre la intoxicación de 60 niños en el Liceo Francés de Barcelona

La multinacional, matriz de Serunion, apuntó al agua como culpable del brote, cuando las autoridades se centran en su menú

27 junio, 2016 23:59

Elior mintió sobre la intoxicación de 60 niños en el Liceo Francés de Barcelona. La multinacional, matriz de la firma de catering Serunion, señaló la pasada semana al agua como culpable del brote de vómitos y diarrea que afectó a los párvulos. La empresa lo hizo a sabiendas de que la Agencia de Salud Pública de Barcelona investiga su menú como factor sospechoso de haber causado el malestar en los menores.

"Desde casi el minuto uno las autoridades sanitarias descartaron que el agua del grifo enfermara a los pequeños. El Liceo activó el protocolo de agua embotellada por precaución", aseguran fuentes cercanas a la prestigiosa institución escolar.

Preguntado sobre la cuestión, un portavoz de la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), a cargo de la investigación, ha confirmado que las pesquisas "se centran en el menú de tres platos" servido a los niños de P3 a P5.

Culpa de la ciudad

Las dos versiones recabadas por este periódico contrastan con la información aportada por Philippe Salle, director y consejero delegado de Elior, hace justo siete días. En un encuentro con la prensa, el directivo indicó que "el catering que se sirvió no tiene nada que ver, fue el agua. Es culpa de la ciudad".

Fuentes cercanas al Liceo rechazan de plano la explicación y aclaran que "todos los niños siguieron bebiendo agua del grifo con normalidad cuando se desactivó el protocolo de alerta".

Cinco ambulancias

La intoxicación de los 60 alumnos y personal del centro se produjo el pasado 15 de junio. Los pequeños empezaron a verbalizar molestias dos horas después del parón de mediodía para comer.

Hasta la escuela de párvulos del Liceo Francés se desplazaron cinco ambulancias para atender a los menores. Ocho de ellos requirieron atención médica en las urgencias de la Clínica Teknon de Barcelona, y hubo faltas en clase el día siguiente.