Primeras planas

Jarrones chinos contra la sedición

Rajoy descarta por completo la aplicación del artículo 155. González, Aznar y Zapatero, juntos y de acuerdo: El Estado superará el reto secesionista

6 julio, 2017 09:29

Las casas de apuestas todavía no han entrado en el tema de si se celebrará el referéndum o no. Como son empresas serias no deben ver claro qué entiende Puigdemont por un referéndum y qué considera Rajoy que es impedir un referéndum.

El 1 de octubre pasarán cosas y se antoja más plausible que tengan que ver con el 9-N que con mossos comandados por la Benemérita de Cospedal trincando urnas y cerrando colegios. De ahí que hablar sobre el Ejército y la integridad territorial sea municionar los sueños húmedos de Lluís Llach, que en su día dijo que recibiría a los soldaditos en la Diagonal con café con leche. Salvo para los medios de estricta obediencia soberanista, la ley del referéndum tiene menos garantías que un coche de segunda mano en el mercado de la calle, de lo que se infiere que para organizar una consulta válida y vinculante a los promotores de la cosa les vale con mil mesas de camping y dos mil cajas de zapatos.

Como parece que la Generalitat dispone de un censo y pretende designar a los presidentes y vocales de las mesas por sorteo, el punto de tensión se traslada de los funcionarios a los ciudadanos que reciban una notificación de las autoridades autonómicas autodeterminadas con el aviso de que el día primero de octubre se personen en tal colegio electoral. ¿A quién obedecer? El Estado es más gordo que la Generalitat, pero la Generalitat está más cerca. Antonio Fernández expone en El Confidencial la carta tipo que han redactado un grupo de abogados por si a algún insolente, insumiso y disidente reaccionario quiere ejercer su derecho a decidir desobedecer.

También cabría la opción de decir que sí, que de acuerdo, "i tant" y luego no presentarse, cosa que podría considerarse boicot y acarrear serias consecuencias en los pueblos más pequeños. Así es que eso se dice más fácil en Barcelona que en Vilatorta del Camp.

Los expresidentes González, Aznar y Zapatero se consideran así mismos jarrones chinos de incalculable valor, inmaculada perfección y suma belleza, pero ahora mismo ejercen de los guerreros de terracota de Shi Huang. En su caso, el tiempo ha cerrado viejas querellas y están en buena sintonía, como si hubieran formado una especie de club de los presidentes eméritos. Ningún reparto tuvieron en participar en un entretenido coloquio del ABC y Las Provincias de Valencia celebrado en Madrid. Apuestan por Rajoy, según la crónica en el diario monárquico de Itziar Reyero y Víctor Ruiz de Almirón: " 'España sin Cataluña no es España, es otra cosa. Por eso, no será', zanjó González, que aseveró que en los gobernantes catalanes 'hay una incitación clara a la sedición'. 'Antes de romperse España se romperá Cataluña', advirtió Aznar, que acusó a los independentistas de 'demoler' la convivencia en su comunidad. 'La deriva independentista es un viaje a ninguna parte', describió Zapatero, que concluyó optimista que 'el problema es superable'. (...) Tras insistir (González) en que la Generalitat 'incita a la sedición', mencionó el artículo 155 de la Constitución, que dijo que 'afortunadamente' es 'ambiguo' y 'se puede graduar'. 'Lo que el artículo 155 exige a los responsables de gobierno es que si se vulneran las normas constitucionales y estatutarias, hay que dar una respuesta para devolver la realidad al ámbito constitucional', afirmó. Aznar no le recogió ayer ese guante, aunque otras veces se ha manifestado a favor de suspender la autonomía catalana si no hubiera otro remedio".

Zapatero tuvo que abandonar la sala porque le requieren como mediador en Caracas, donde patrullas de la porra bolivarianas asaltaron el parlamento y molieron a palos a los diputados opositores que celebraban el día de la independencia.

Rajoy no dejó acudir al evento periodístico a ningún ministro como consecuencia de la guerra entre el ABC y el ministro Montoro. Y del 115, ni hablar, según informa en La Razón Carmen Morodo, que escribe: "Pese a que el independentismo siga elevando la escenificación del órdago, en Moncloa insisten en que no va a haber urnas. Una confianza tan firme que desconcierta. 'No tienen censo y ni siquiera van a tener locales donde colocarlas', alegan. Todos los escenarios están analizados, y aunque formalmente el Gobierno no descarta ninguno, tampoco los anticipa. Ahora bien, en lo que afecta al discutido artículo 155 de la Constitución, la previsión con la que trabaja el Gobierno es que no hará falta avanzar por ese camino para hacer frente al desafío porque 'hay otros instrumentos para atajar el problema y garantizar que se cumple la ley'. El 155 es 'el último recurso', la última bala que confían en que no sea necesario utilizar aunque no implique la suspensión de la autonomía –precisan–, sino 'asumir parcialmente competencias si un Gobierno autonómico actúa con deslealtad'. 'Si no hay otra alternativa, se actuará. Pero hay otros mecanismos antes', y citan, a continuación, la reforma de 2015 del Tribunal Constitucional.- 'No vamos a dar argumentos al victimismo y a la manipulación independentista. Desde fuera hablan unos y otros, pero hay que ser muy prudentes', argumentan".

Portada del 'ABC' del jueves 6 de julio

Portada del 'ABC' del jueves 6 de julio

Portada del 'ABC' del jueves 6 de julio

En auxilio de la tesis, el fallo del Constitucional que anula la partida presupuestaria para el referéndum. Resalta Ángela Martialay en un despiece en Voz Populi la carga de profundidad constitucional: "El TC pide expresamente que se notifique su fallo al secretario del Govern, Joan Vidal; al secretario de la Vicepresidencia y de Economía y Hacienda, Josep Maria Jové; a la interventora general de la Generalitat, Rosa Vidal; y a la directora general de Presupuestos, Anna Tarrach. También solicita que se notifique personalmente la resolución al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont; y a cada uno de los miembros del Consejo de Gobierno de la Generalitat".

Arcadi Espada se muestra inclemente con Morenés en su artículo de El Mundo. Espada subraya que la carta del embajador al New York Times entra al trapo y cae en la trampa secesionista: "Es completamente normal que una inteligencia como la del corresponsal Minder, por poner un ejemplo de la casa, escriba que "la independencia fue aprobada [!] en la consulta de 2014". Ahora bien, que un embajador de España acepte ese razonamiento y se ponga a discutir sobre los porcentajes de una ceremonia rudimentaria e ilegal (el segundo adjetivo es de los tribunales) solo refleja el desconcierto político que el gobierno del Estado arrastra pesadamente en su respuesta a la maniobra de secesión".

6 de julio, santoral: María Goretti, Ciriaca, Dominica, Antonino, Rómulo e Isaías.