El vicepresidente económico de la Generalitat, Oriol Junqueras, con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro / CG

El vicepresidente económico de la Generalitat, Oriol Junqueras, con el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro / CG

Política

Los trabajadores de las oficinas liquidadoras se sienten “humillados” por Junqueras

Los damnificados por la nueva Hacienda catalana se movilizan y elaboran un manifiesto en el que defienden su papel en la lucha contra el fraude fiscal

16 marzo, 2017 00:00

“Humillados y menospreciados”. Así se sienten los trabajadores de las oficinas liquidadoras que la Consejería de Economía, cuyo titular es Oriol Junqueras, se quiere quitar de encima –dependen del Ministerio de Justicia--. Así lo hacen constar en un manifiesto, al que ha tenido acceso Crónica Global y en el que defienden su papel, reconocido por la propia Generalitat, en la lucha contra el fraude fiscal.

Los afectados por la revocación del convenio entre la Generalitat y las oficinas liquidadoras dirigidas por los Registradores de la Propiedad critican a Oriol Junqueras por eliminar “51 oficinas desplegadas por toda la geografía de Cataluña, perdiendo por tanto proximidad al ciudadano”. “Muchos alcaldes han manifestado, al igual que hacemos nosotros, el miedo a perder un servicio que hasta el momento funciona con eficiencia, eficacia y proximidad, llegando al punto de ofrecer de manera gratuita espacios municipales”, recuerdan.

Incertidumbre

Denuncian la incertidumbre en que se encuentran 271 trabajadores “ampliamente formados, con experiencia contrastada, con familias y cargas familiares; personas que en muchos casos cuentan con más de 30 años de experiencia que verán como de la noche a la mañana pasarán de llevar el peso de las oficinas a perder sus derechos adquiridos y ocupar trabajos muy por debajo de sus capacidades, con las disminuciones del sueldo que ello conlleva”.

Asimismo, advierten de la contradicción en que incurre el Gobierno catalán al alabar su "lucha contra el fraude fiscal, comprobando el 100% los documentos presentados”, al tiempo que aseguran que es una utopía que la ATC pueda hacer su trabajo y "comprobar la totalidad de los expedientes presentados”.

Los trabajadores añaden que, durante las reuniones mantenidas hasta ahora, los responsables de la Agencia Tributaria de Cataluña (ATC) afirman que “con más tiempo las cosas se podrían hacer de otra manera, pero es lo que hay".

Menos plazas

Cada día que pasa “quedan menos plazas”, ya que mientras el secretario general de Hacienda de la Generalitat, Lluís Salvadó, ofreció en septiembre de 2016 un total de 256 puestos para cubrir 15 delegaciones, ahora se les ofrece "sólo 240 vacantes, eliminando las más cualificadas”.

“Tenemos que escuchar que se nos quiere y que se nos necesita, pero a precio de ganga, despreciándonos y humillándonos”. Concluyen: “Aparte de nerviosos, inquietos, depresivos, enfadados y desconfiados estamos hartos; hartos porque nuestra única demanda es trabajar y creemos que nos merecemos un respeto y porque creemos que las cosas se pueden hacer mejor”. El manifiesto va acompañado de una recogida de firmas.