El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà / EUROPA PRESS

El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà / EUROPA PRESS

Política

Tardà trata de escandalizar al Congreso

El portavoz de ERC acusa al "Reino de España" de usar la "violencia judicial" y propugnar "la castración química" del Parlamento catalán

27 octubre, 2016 14:27

El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, ha lanzado un duro y provocador alegato independentista durante su intervención de este jueves en el debate de investidura. "Referéndum o referéndum. Solución democrática pactada o con la legalidad internacional. No cabe ninguna otra", ha señalado desde la tribuna del Congreso.

Tardà ha acusado al Gobierno y al "Reino de España" de falta de "convicciones democráticas": "Ustedes son demócratas instrumentales para obtener el reconocimiento internacional, pero son nacional-constitucionalistas". Y ha asegurado que la Generalitat convocará el año que viene un referéndum para la secesión de Cataluña. En ese sentido, ha apelado al referéndum celebrado hace dos años en Escocia.

"La distancia entre el proceder de Cameron y el suyo es la misma distancia que existía entre Churchill y su acólito Franco", ha indicado el dirigente independentista, que también ha comparado la actuación del Gobierno con la de Turquía respecto a los kurdos, o la de Serbia durante la guerra de Yugoslavia de los años 90.

"Uso de la fuerza"

Según Tardà, "desde el año 2010 [con motivo de la sentencia sobre el Estuto] la Constitución está muerta en Cataluña". El diputado de ERC ha acusado al Gobierno de "tramposos" y de "estár dispuestos a hacer uso de la fuerza contra las instituciones catalanas" y de utilizar la "violencia judicial" y la "represión".

"Venceréis porque tenéis sobrada fuerza bruta, pero no convenceréis porque para convencer hay que persuadir, y ni tan solo con el uso de la fuerza bruta podréis vencer porque ya no estamos en los años 30 del siglo pasado", ha señalado Tardà parafraseando a Unamuno frente a Millán Astray.

Rechaza negociar la financiación autonómica

El dirigente independentista ha rechazado la oferta para mejorar la financiación de la Generalitat planteada por Rajoy. "Ya nos han engañado muchas veces, no nos creemos nada de ustedes", ha dicho.

Y ha asegurado que el único sistema de financiación que defenderán será el de una eventual República catalana independiente.

Compara a los socialistas con los pro-nazis franceses de 1940

Tardà ha comparado a los diputados socialistas que se abstendrán para permitir la investidura de Rajoy con los diputados socialistas franceses que en 1940 votaron a favor del régimen pro-nazi del mariscal Pétain.

"Siempre hay socialsitas con dignidad. Les recuerdo que, en 1940, 60 socialistas no dieron su apoyo al mariscal Pétain y la inmensa mayoría de socialistas sí. De manera que aplaudimos a los diputados socialistas que el sábado dirán que no", ha señalado.

Ratificación de Forcadell

El portavoz republicano ha augurado que los procesos contra Mas, Rigau, Ortega y Homs por desobedecer al Tribunal Constitucional el 9-N terminarán en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. "El mundo sabrá que ustedes pretenden retener a los catalanes por la fuerza", ha añadido. Y ha reiterado que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, está "dispuesto a ir a la cárcel" por convocar un referéndum independentista.

Tardà también ha lanzado una advertencia: "El pueblo catalán no va a aceptar la castración química de su parlamento. Deben saber que, si inhabilitasen a Carme Forcadell, el Parlamento de Cataluña procederá a ratificarla de inmediato en su cargo. Lo que el pueblo elige no puede ser destituido por un tribunal político".

Mano tendida a Podemos

"No tenemos miedo a sus actuaciones, ni a las amenazas de la señora Susana Díaz. No nos someteremos a sus inhabilitaciones", ha sentenciado Tardà, quien ha anunciado que el Gobierno autonómico catalán seguirá adelante con el "proceso" de "desconexión" de Cataluña del resto de España.

Finalmente, ha pedido ayuda a los "compañeros" de Podemos en estos objetivos, prometiendo que posteriormente habrá una "fraternal hermandad entre ambas repúblicas", la española y la catalana.