Ya se fueron los Reyes. Los de aquí, no; los Magos. Dicen que dejaron regalos. A los niños, sí. ¿Y a los partidos de izquierda? ¡Ah! Complicado, ¿no? Porque los Reyes son de derechas. O eso dicen. ¿Qué le habrán dejado al PSOE? Algún disgusto, seguro. Premio ya habían tenido en Navidad con los cinco décimos premiados, que nadie sabía dónde estaban. ¿Nadie? Dudaban si en la vieja sede o en la nueva. Tenían décimos premiados y dos sedes para repartir. Las desgracias nunca vienen solas. Porque el premio de los décimos también ha sido una desgracia. O un escándalo sin aclarar. Lotería, dos sedes, y encuestas que certifican su caída en picado. Como éramos pocos...

El mejor resultado da a los socialistas un 19% de intención de voto. Y rápidamente los Podemitas se han puesto a trabajar para reconquistar la paz interna. Y llegar unidos a Vistalegre II y asegurarse el liderazgo de la izquierda. Unidad y dominio de la izquierda. A eso aspiran. O eso venden. Quieren aprovechar la oportunidad. Ven al PSOE abierto en canal. Sin líder. Y sin opciones de tenerlo. No hay candidato/a declarado. No se sabe para cuando. Los meses van pasando. La Gestora no se sabe para quién está trabajando. O sí. Con parcialidad. Prolongando el tiempo para ver qué hace la Sultana de Andalucía, digo Susana. Y para ver si Pedro Sánchez se aburre y abandona de una vez por todas. La Gestora no consigue resultados. Va tan lenta, está tan muerta que lo único que provoca es la desbandada de los votantes socialistas. Deberían estudiar cómo se hundió y luego desapareció el partido socialista italiano. Para no cometer los mismos errores que ellos. Porque tal como van...

La Gestora no consigue resultados. Va tan lenta, está tan muerta que lo único que provoca es la desbandada de los votantes socialistas

Lo de la lotería ha sido un poco de risa. De humor. Pero lo de la segunda sede o sede bis es de coña. Los sanchistas lo niegan, pero el disparate está ahí. En la misma calle Ferraz. De traca. Pedro Sánchez ha desaparecido. Grave error fue el dimitir de diputado. Se dejaría ver por el Congreso. Aunque poco, porque el Congreso está de vacaciones. Vacaciones de enero para los representantes del pueblo. Esto también es de traca. De mucha traca. Y los aguantamos. Y les pagamos. Bueno, cobran ellos, que para eso hacen las leyes para sí. ¡Qué pacientes ciudadanos!

Así que tenemos un PSOE con dos sedes, cinco décimos premiados, pero sin líder y sin votantes. Alarma. Porque si los votantes se van a Podemos, adiós al liderazgo de la izquierda. Entonces ¿para qué va a venir a Madrid Susana de Andalucía? Ella quiere entrar en olor de multitudes. En carruaje tirado por caballos. Negros, a ser posible. Como Cleopatra entró en Roma. Aclamada. Pero tanto retrasar la llegada por parte de ella y de la Gestora puede que los caballos no tiren del carro. Por la sed de verano, que es duro y seco en Castilla. Mucha lentitud tiene el Fernández, jefe de la Gestora, en buscar sustituto. Y largarse a Asturias, que la está perdiendo. A lo peor, cuando Susana de Andalucía, quiera cruzar Despeñaperros sufre el asalto de los Hernando (ambos, que para eso están en coalición) y se queda sin caballos.

Para esta enfermedad del PSOE es difícil buscar remedio. Puede que no lo haya. O que llegue tarde. Puede que Rajoy los triture con un adelanto electoral. Y que Iglesias y Errejón se den el abrazo de la paz y pasen a dirigir la izquierda. Puede pasar de todo. La realidad es que el PSOE está hecho trizas y que no hay acuerdo ni para fijar fecha para el Congreso. Mucho menos para lo más importante: qué quiere ser de mayor. Adónde quiere ir. ¿Quo Vadis PSOE?