Los ciberdelincuentes aprovechan cualquier momento para realizar ataques por internet / EFE

Los ciberdelincuentes aprovechan cualquier momento para realizar ataques por internet / EFE

Business

¿Cómo afecta el ‘malware’ al internet de las cosas?

Los ciberatacantes pueden sustraer información relacionada con tus gustos y aficiones, imágenes, la localización de tu casa e influir en tus decisiones de compra

7 julio, 2017 00:00

Los dispositivos son cada vez más vulnerables y los que operan bajo la tecnología del internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés) aparecen ya en el radar de los ciberdelincuentes.

Desde Kaspersky Lab han detectado más de 7.000 tipos de malware (o código malicioso) dirigido contra estos equipos inteligentes, de los que más de la mitad han aparecido por primera vez este año.

Pero, ¿por qué pasa? Los dispositivos como los smartwatches, Smart TV, routers o cámaras se están conectando entre sí generando una red de interacciones en un entorno exterior. Esto se conoce bajo el nombre de internet de las cosas.

Persona con un ordenador y código fuente / EFE

Persona con un ordenador y código fuente / EFE

Persona con un ordenador y código fuente / EFE

Según el Cisco, el número de dispositivos conectados a internet en 2020 será de 50 billones frente a los 7.600 millones de personas en el mundo. Esta tendencia “hace más relevante la necesidad de aumentar la seguridad de nuestros dispositivos con soluciones específicas”, comenta Herve Lambert desde Panda Security. “No hablamos de nada raro, son objetos cotidianos interconectados y con acceso a internet”.

¿De qué manera afecta?

Con un malware en IoT se puede conseguir “la localización de tu casa, tu coche, tu apartamento en la playa o en la nieve; imágenes, vídeos y cualquier otro tipo de información de valor; tus gustos y aficiones, cosa que es genial para influir en tus decisiones de compra y utilizar tus dispositivos para hacer ataques DDoS, de negación de servicio distribuido”, detalla. “En definitiva, toda tu vida está a un malware de malos”.

Los riesgos son, básicamente, interferencia en la privacidad, proliferación de tecnologías, y por ende, incremento de fallos y riesgos así como una recogida de datos no autorizada.

¿Cómo actúan?

Según el experto de Panda Security, los ciberdelincuentes hacen lo mismo que hacían antes pero adaptándolo a los nuevos dispositivos y sistemas de comunicación.

“La mayoría de la gente suele pensar que no tiene nada interesante, que no almacena en su ordenador o móvil nada por lo que le vayan a chantajear y que su vida no es interesante para otros. Por eso, no toman grandes medidas para salvaguardar la privacidad de sus equipos”, expone.

Código fuente / EFE

Código fuente / EFE

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Sin embargo, los cibercriminales aprovechan esta carencia de seguridad en cualquier tipo de dispositivo de personas corrientes para infectarlos y usarlos a su antojo.

Manipulación en remoto

“Una vez dentro de estos dispositivos, los hackers instalan un malware que les permite manipularlos en remoto para esparcir virus y ransomware en cientos de dispositivos sin dejar prácticamente huella de su ataque”, y añade “es más, los primeros investigados por la policía son los dueños de los dispositivos que los cibercriminales han usado como mulas”.

“Con el internet de las cosas se ha creado una brecha de seguridad enorme de la que ya hemos visto en las últimas semanas consecuencias tan graves como el DDoS que hubo en octubre en Estados Unidos y que tumbó webs como Amazon, Spotify o Netflix”, declara Lambert.

¿Cómo pueden protegerse los dispositivos?

Tener un antivirus ya no es suficiente: “Necesitamos sistemas que defiendan de forma coordinada todas las conexiones a internet de cada persona, ya que cualquier dispositivo, ya sea un smartwatch, una alarma de incendios, un móvil o una cafetera con conexión pueden convertirse en piezas clave para efectuar ataques”.

“Con un ordenador personal o teléfono es fácil descubrir una infección de malware al notar que la máquina no funciona como debería pero, en un dispositivo conectado, a no ser que cuente con una protección integral, el usuario no tiene forma de saber que han sido infectados”.

Internet de las Cosas / EFE

Internet de las Cosas / EFE

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No hay soluciones universales, aunque el experto recomienda la utilización de las mismas medidas de seguridad con los ordenadores o móviles que con todos los dispositivos que se tienen interconectados en casa.

¿Cuáles los objetos que más sufren?

“Potencialmente todos”, afirma Lambert. “Los que no dispongan de barreras de seguridad y mecanismos para mantenerse siempre actualizados serán los primeros en caer”. “No importa el tipo de dispositivo, sólo la complejidad de llegar a ellos y saltarse sus controles de seguridad, usando en la mayoría de los casos vulnerabilidades”, concluye.